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 miércoles, 07 de enero de 2004

Un 7 de enero...
Efemérides
De 1324: Muere el legendario navegante y explorador Marco Polo

Guillermo Zinni / La Capital

El legendario navegante italiano Marco Polo, quien pasó a la historia gracias a las asombrosas narraciones que realizó de sus viajes, nació en Venecia en 1524, y era descendiente de una familia establecida en esa ciudad en el siglo XI y dedicada al comercio. Conoció a su padre, el también navegante Nicolás Polo, quince años después de su nacimiento y cuando su madre ya había muerto, y dos años después emprendió junto con él y su tío Mateo la primera aventura como mercader viajero. Marco había sentido despertar su curiosidad a causa de los relatos que había escuchado de sus parientes, y estaba dispuesto a seguir sus pasos. Fue asiduo acompañante a las mansiones y cacerías del emperador mongol Kublai Khan, quien lo nombró gobernador de la ciudad de Yangchow y lo envió a misiones especiales a Birmania, a las selvas de China oriental, al Tíbet y a la India. Su gran inteligencia y su memoria privilegiada le permitieron aprender varias lenguas y dialectos y recordar hasta los más pequeños detalles de sus andanzas, los que más tarde imprimió en sus relatos. Estuvo al servicio de ese emperador durante 17 años, mientras su padre y su tío capitalizaban los beneficios de su posición privilegiada enriqueciéndose en el comercio. Volvieron a Venecia en 1295, y aunque al principio eran tres desconocidos que ni casa tenían pues sus familiares al creerlos muertos habían vendido sus pertenencias, al paso del tiempo lograron conquistar a sus coterráneos con la exhibición de sus riquezas y el relato casi fantástico de sus hazañas y travesías. Participó luego en la guerra entre Génova y Venecia, pero cayó prisionero en la batalla de Curzola. Durante los tres años que pasó en la cárcel contó una y otra vez sus aventuras a Rusticello, un hombre de letras que se hallaba también cautivo y el ques dio forma a las historias que más tarde serían un libro. Cuando fue puesto en libertad regresó a Venecia, hizo copiar el manuscrito y lo mandó editar bajo el título de "Libro de las maravillas del mundo". Falleció el 7 de enero del año 1324 sin que sus vivencias fueran reconocidas como realidades. Sin embargo luego otros navegantes reconocieron que las rutas marítimas que describió eran reales, y hay quienes sostienen que su aporte permitió que en 1492 Cristóbal Colón descubriera el Nuevo Mundo navegando por la ruta de occidente.

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