No puede ganar

Independiente lleva nueve partidos sin alegrías

Independiente extendió su racha negativa a nueve partidos sin victorias, tras igualar anoche como local sin goles ante Lanús, en cancha de Quilmes, en el inicio de la 16ª fecha del torneo Apertura.

El último triunfo del rojo se remonta al 30 de septiembre último cuando le ganó a Olimpo en Bahía Blanca por 2 a 0, en un encuentro de la séptima jornada del certamen.

Por ese entonces, al equipo lo dirigía Oscar Alfredo Ruggeri -la última vez que estuvo sentado en el banco de los suplentes fue ante Colón (1-2) por la octava-, pero desde que llegó Osvaldo Sosa (hace ocho fechas) Independiente no sólo no mejoró futbolísticamente, sino que tampoco ganó.

Es más: decayó aún más en su rendimiento y lo de anoche ante Lanús no varió demasiado de lo que hizo el último sábado frente a Racing, en el clásico que terminó en un pálido y olvidable 1-1.

Independiente mostró un poco más de actitud, pero evidenció las mismas fallas defensivas (el arquero Lucas Molina fue la figura de la cancha) y la anemia ofensiva (ante Racing marcó un gol tras 557 minutos de sequía) que lo llevan a estar en los últimos puestos del torneo.

Es cierto que Lanús no hizo mucho por el espectáculo, aunque sí fue un poco más ambicioso.

A los 21', una volea de Rodrigo Mannara exigió una atajada fenomenal de Molina.

Pero Independiente también tuvo sus llegadas: a los 37' con en un remate de Daniel Quinteros que contuvo Claudio Flores y en otro disparo de Jeremías Caggiano que se fue cerca del palo izquierdo.

El segundo tiempo no cambió y salvo por un cabezazo de Martín Andrizzi, a los 5', para Lanús, y otro de Quinteros, sobre los 40', para el rojo, prácticamente no hubo llegadas en ninguno de los dos arcos.

Entonces, el árbitro Gabriel Brazenas marcó el final del encuentro: Lanús llegó a los 19 puntos e Independiente alcanzó los 16. Pero los dos siguen en deuda. (Télam)

Lanús e Independiente, aburrieron.