Seis muertos al caer un helicóptero de EEUU en los feudos de Saddam

Bagdad. - Seis soldados estadounidenses murieron y otros dos resultaron heridos al estrellarse ayer un helicóptero de combate Black Hawk cerca de la ciudad iraquí de Tikrit, mientras que otro perdió la vida en un ataque en la localidad norteña de Mosul. De este modo, la cifra total de soldados estadounidenses muertos en Irak en la primera semana de noviembre se eleva a 30, tras el derribo de varios helicópteros y ataques con minas, bombas y granadas.

Se desconoce si la aeronave cayó por causas mecánicas o fue derribada. No obstante soldados estadounidenses dijeron que el aparato probablemente fue derribado por una granada propulsada por cohete. Medios árabes citaron a testigos que aseguraron que el helicóptero fue abatido a disparos, mientras que la cadena Al Yazira aseguró que el segundo aparato también fue blanco del ataque, pero que logró aterrizar sin daños. El Black Hawk se estrelló en una de las márgenes del río Tigris y a un kilómetro de distancia del palacio de Saddam Hussein en Tikrit, ahora convertido en base de las fuerzas estadounidenses. Helicópteros de ataque Apache sobrevolaron luego la zona alrededor del sitio de la caída del Black Hawk en Tikrit, a 175 kilómetros al norte de Bagdad, en busca de guerrilleros que pudieron haber disparado un cohete.

Si se confirma que la nave cayó por fuego hostil, sería el tercer helicóptero estadounidense derribado en dos semanas por guerrilleros surgidos tras el derrocamiento del régimen en abril pasado, por la invasión encabezada por EEUU. El pasado domingo, 16 soldados murieron y otros 20 resultaron heridos cuando el helicóptero Chinook en que viajaban fue derribado cerca de la ciudad de Falluja.


Toque de queda
El ejército dijo que el helicóptero había quedado envuelto en llamas tras estrellarse en las riberas del Tigris. "En este momento no sabemos si fue una falla mecánica u otra razón", dijo la mayor Josslyn Aberle, de la 4ª división de infantería. La vocero agregó que el ejército estadounidense estaba considerando volver a imponer el toque de queda nocturno alrededor de Tikrit, como resultado del incidente. El toque de queda había sido levantado a causa del mes sagrado de los musulmanes, el Ramadán.

Por otra parte, la portavoz del comando central norteamericano en Bagdad confirmó también que un soldado norteamericano murió y seis más resultaron heridos durante un ataque lanzado ayer contra un convoy militar en la ciudad de Mosul, en el norte de Irak. También en Mosul, policías iraquíes y soldados estadounidenses detuvieron a varios sospechosos de otro ataque perpetrado en la víspera, que había causado tres civiles iraquíes muertos y varios soldados estadounidenses heridos.

Además, Al Yazira informó de que una mujer iraquí murió ayer cuando una granada de mortero estalló en su casa de Al Makdadiya, al este de Bagdad. Su esposo resultó herido en el ataque, que al parecer tenía como objetivo una estación de policía próxima.

Entre tanto, las tropas estadounidenses desmantelaron una célula de resistencia en Husaybah, cerca de la frontera con Siria, y detuvieron a 12 personas. Los detenidos son acusados de haber coordinado acciones violentas contra las tropas norteamericanas, entre otras tareas de organización y proporcionar cobijo, armas y transporte para los atacantes.

Según los observadores, un gran número de extremistas ha entrado en Irak desde Siria después de la caída del régimen de Saddam y la ocupación estadounidense de Irak.

Los incidentes de ayer elevaron a 141 la cifra de soldados estadounidenses muertos en acciones desde que Washington declaró terminadas las grandes batallas el 1º de mayo, un número superior a los 114 que perecieron en el curso de la invasión en marzo y abril. (DPA y Reuters)

Apaches donde se estrelló el Black Hawk.