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 miércoles, 05 de noviembre de 2003

Aníbal Fernández: "Hay que prevenir antes de que haya otro muerto"
El ministro del Interior, que estuvo en el Gigante, se quejó del operativo

El ministro del Interior, Aníbal Fernández, acentuó su interés en resolver el tema de la violencia en el fútbol "antes de que haya otro muerto", a partir de su última experiencia como "hincha" de Quilmes, que data del sábado pasado, cuando vio desde la tribuna visitante la derrota de su equipo ante Rosario Central, en el Gigante de Arroyito.

Fernández, quien es además el presidente de la Asamblea de Representantes del club sureño, advirtió en una nota con FM Sur, de Quilmes, que "esta problemática se debe resolver con inteligencia, previniendo los hechos violentos, porque después se reacciona cuando hay un muerto".

"El otro día en Rosario comprobé en el lugar de los hechos que a los hinchas visitantes los mandan a morir, porque tienen como lugar de estacionamiento de los vehículos en que se trasladan el parque Alem, que está justo detrás de la cabecera local", explicó.

"Ya (Javier, director del Prosef) Castrilli me dijo que recibió varias denuncias por agresión que se produjeron en ese sector del estadio de Central. Hace rato que tendrían que haber cambiado los destinos de las hinchadas en las cabeceras y no sé por qué no se hace", enfatizó el funcionario.

El ministro describió algunos sucesos de los que fue testigo el sábado, cuando se ubicó sin su custodia personal en medio de la hinchada quilmeña.

"Un policía disparó un tiro cuando salía la gente con cero necesidad de hacerlo, porque en el lugar había mujeres con chicos. Por eso le pedí a Castrilli que trabajara con un informe que hice y voy a elevar también a la gobernación de Santa Fe", anunció Fernández.

"El problema es que las provincias se guardaron algunos poderes, como el de la policía, y así desde la Nación no podemos legislar para que actúe con mayor severidad y saque a esos diez o 15 violentos que van a las canchas. Si lo hacemos, todo volverá a la normalidad", opinó.

Sobre este punto el ministro arengó "no solamente a la policía, sino también a los periodistas, a los árbitros y a todos los que tengan que ver con el fútbol, para que colaboren en pos de una solución, aportando datos e ideas".

"Si en Gran Bretaña lograron resolver el gravísimo problema de los hooligans con más inteligencia que represión, por qué nosotros no podemos hacer lo mismo. Callarse la boca es de tontos, así que debemos actuar en consecuencia lo más rápidamente posible. De lo contrario vamos muertos", remarcó finalmente Fernández. (Télam)

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Fernández habló como ministro y como hincha.

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