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 domingo, 21 de septiembre de 2003

Será el protagonista de "Padre Coraje" que Canal 13 prepara la próxima temporada
Facundo Arana: "Que digan que soy sexy es sólo una anécdota"
El actor interpretará a un personaje obligado a encubrir su verdadera identidad bajo una sotana

Rodolfo Bella / La Capital

Facundo Arana prepara su regreso a la telenovela en el personaje protagónico de "Padre Coraje", junto a Millie Stegman y Carina Zampini, donde interpretará a un personaje al que las circunstancias obligarán a ocultar su verdadera identidad bajo los hábitos de un sacerdote. El actor contó a Escenario cómo se prepara para la nueva producción de Pol-ka que, según adelantó, podría transformarse en el plato fuerte de la próxima temporada de Canal 13.

-¿Cómo te ves con los hábitos?

-Creo que nos vamos a divertir muchísimo. El punto de partida es muy atractivo. Todavía no hay muchas precisiones, pero eso diría que es casi lo único que está puesto como eje de todos los conflictos. Contar esta historia desde una persona que se pone los hábitos porque no le quedaba otra y no porque lo había elegido es interesante para ver qué le pasa a él y a la historia misma, porque se encuentra con determinadas cosas que le cambian el curso de su historia.

-Es un hombre con limitaciones para seducir y dejarse seducir abiertamente...

-Pero el tipo no tiene la sotana tatuada. Cuando se la saca también se saca el personaje. En ficción, es un personaje muy seductor y sobre todo desde donde va a contar la historia. Me encantaría contar más, pero lo único que tengo en claro son dos o tres cosas como esos momentos casi fotográficos para el personaje, cosas que uno prepara para ponerle un poco de color.

-¿Es una telenovela clásica?

-Es televisión. Se optimizó tanto el tema de contar historias en televisión que, por ejemplo, es bastante difícil poder decir si "099 Central" fue una telenovela o un policial. En realidad uno siempre termina contando historias, sea lo que sea.

-¿De qué manera se optimizó contar historias?

-Se optimizó en cuanto a que ya no es el culebrón. La telenovela empezó siendo eso hace veinte años, pero cambió en la manera de contar. Todo el tiempo tiene que estar pasando algo y puede haber una línea argumental que se va resolviendo semanalmente, pero en realidad casi todo el tiempo tenés que estar tirando anzuelos.

-¿Tiene que ver con que es difícil encontrar historias que resulten originales?

-No, sino que tiene que ver con la velocidad con la que se vive hoy que no es la que había hace veinte años. Ahora todo es más veloz y la manera de contar también es más veloz. Creo que hay una búsqueda constante en ese sentido.

-¿Cuánto influye en eso la competencia por el rating?

-Siempre cuando uno trabaja en televisión hay una cuestión que tiene que ver con el rating, porque si no tiene rating no sigue en el aire. Uno tiene que tener eso en claro. También está la parte que tiene que ver con contar historias, hacer arte y toda la cuestión, pero hay que tener en cuenta que hay una planilla que va a venir todos los días.

-¿Cómo se articula tener presente el rating y hacer arte?

-Cada uno tiene que atender su juego. Si bien yo miro las planillas y también cuánto hicieron los programas que están en el mismo segmento horario, el rating lo tienen que tener en cuenta otras áreas porque yo principalmente tengo que estar preocupado en hacer bien mi trabajo. Pasa en todos las actividades, porque si no cuando querés hacer una obra de teatro te vas a la plaza Francia y cuando alguien mete la mano en el bolsillo le decís que no, que era por amor al arte. Lo tengo muy claro. El negocio es el negocio y nosotros estamos en el negocio del espectáculo. Son cosas que no tienen que ver con uno sino con el canal. Uno contó una historia y punto y aparte.

-¿Tuviste que preparar alguna habilidad especial para tu personaje?

-Estoy preparando algunas habilidades que tendrá el personaje. Por ahora son dos horas de entrenamiento, pero llegarán a seis. Pasa que todavía hay tiempo para contarlo.

-Hace un tiempo te eligieron el hombre más sexy de Argentina...

-En realidad tiene que ver con un momento de mi historia, pero la verdad es que no ando detrás de esas cosas. Creo que fue algo que hizo la revista Cosmopolitan. No era más que eso. Pero son anécdotas que me guardo para el día de mañana.

-Tampoco es algo menor...

-No es menor, pero no es algo en lo que realmente me recueste. No son cosas que uno se pueda tomar seriamente. Son lindos logros pero lo tenés que dejar como anécdotas para tus nietos.

-¿Cómo lo toma tu pareja?

-Con tranquilidad. Es un trabajo, si no te lo tomás así, no te merecés el lugar que la gente y el medio te dan. Te dicen cosas muy lindas, pero punto y aparte. Los elogios son un regalito muy lindo que te hacen pero mi trabajo es contar historias.

-¿Cómo opera en las fantasías que proyectan las mujeres sobre determinados actores poner a una persona atractiva en un personaje socialmente inaccesible?

-Eso es lo más interesante porque es ahí donde aparece la riqueza de ver cómo podés contar una historia. Una misma escena con una determinada luz invita a que eso que es prohibido pareciera accesible, pero no te olvides que no estás hablando de un cura, sino de una persona disfrazada de cura. Eso es lo que estará todo el tiempo absolutamente claro por una cuestión de respeto a la Iglesia.

-¿Cuál sería tu trabajo ideal?

-Mi trabajo ideal es siempre la oportunidad de poder contar una historia y el solo hecho de ser convocado es importante. Después, si es para ser protagonista o no, no son cosas que no hagan a la historia.

-¿No influye en el momento de aceptar un trabajo que seas o no protagonista?

-No hace a la cuestión porque además quien encabeza un elenco no es el protagonista necesariamente. Hay escenas y personajes que tienen tanto peso en determinado momento que se transforman en el centro de la historia.

-¿Una producción de Pol-ka implica un determinado nivel de calidad?

-A esta altura sí. Eso no implica que el resto de las productoras no garanticen una calidad determinada, pero es impresionante el laburo que hay detrás. Los productores están preproduciendo en septiembre para comenzar a grabar en enero un producto que se largaría en marzo.

-¿Cómo viviste que Telefé y Canal 13 se disputen tu contrato?

-La verdad es que estoy al margen de eso. Hay que cuidar esta cosita tan débil y tan peligrosa que es el ego. Trato de no meterme con lo que no puedo lidiar demasiado. Creo que hay cuidarse de las trampas del ego porque a veces te mete la pata y te caés adelante de todo el mundo.

-¿Por qué pensás que las telenovelas argentinas se venden muy bien en el exterior?

-Hay cartas que llegan de culturas tan diferentes como Grecia hasta los Emiratos Arabes, Hungría o Rumania. Creo que tan distintos no debemos ser porque a la hora de contar una historia a todos nos pega por igual. Nuestras historias se ven en todo el mundo y terminamos haciendo notas para publicaciones extranjeras con lo cual de alguna manera terminamos siendo embajadores del país.

-¿Hacés planes a largo plazo en tu profesión?

-Tengo recién 31 años y mucho tiempo para desarrollarme. Pero a largo plazo siento que no tenemos que perder la esperanza y nunca bajar los brazos. Los argentinos tenemos muchas cosas, pero también mucho aguante. Somos privilegiados y tenemos mucha suerte por tener trabajo. Por eso mismo tenemos que tratar de abrirle los brazos a cuanta más gente podamos porque los privilegiados somos cada vez menos.

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"La clave es la tentación de un hombre prohibido".

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