 | domingo, 17 de agosto de 2003 | Demasiadas preguntas, ninguna respuesta El periodista había salido a pasear con su familia por el centro comercial de un conocido hipermercado local y no pudo con su genio. Hombre del oficio al fin, el rumor llegó hasta sus oídos y quedó fielmente grabado en una entrenada memoria. Es que algunos locatarios del coqueto shopping se quejan del "doble discurso" que llega desde la casa matriz acerca de las reglas comerciales a seguir. Sucede que el rigor volcado en la teoría diverge de las pautas aplicadas en la práctica. Es que, según se comenta, alguien vinculado con el departamento de marketing que coordina ese centro comercial inauguró un local del rubro gastronómico a nombre de un familiar. La pregunta que muchos se hacen es: ¿se puede ser juez y parte? ¿Pagará el mismo alquiler que los colegas? ¿Abonará las expensas del mismo modo que los demás locatarios? Y las respuestas, por ahora, no aparecen.
| Un piquete en Augustus No era fácil, ayer al filo del mediodía, transitar por la peatonal Córdoba entre Corrientes y Entre Ríos. Es que en las mesitas que una clásica confitería local instala habitualmente sobre la vereda se había sentado a tomar un café (un café, sí, sólo un café) nada menos que Elisa Carrió. Y ya se sabe que la ex candidata presidencial del ARI goza de amplio consenso en la Chicago argentina. Las consecuencias son lógicas: una multitud de rosarinos se aproximó a la popular Gorda para hacerle todo tipo de recomendaciones, reclamos, sugerencias y también elogios, claro. En síntesis: entre los numerosos admiradores de Lilita y ella misma, el tránsito estaba completamente obstruido en la peatonal. "¿Qué hay, un piquete?", interrogó un atildado y trajeado individuo que lucía impactante corbata en tono violeta. No era para tanto, señor, pero casi. Casi.
| Vigilante irrespetuoso Otra de la Carrió. El día del acto en plaza Pringles, esa zona de la ciudad se convirtió en un auténtico caos. Ya se sabe, Elisa es querida en Rosario. Pero una señora de cierta edad no estaba enterada de la presencia de Lilita ese día y no tuvo mejor idea que consultar acerca de los motivos de la aglomeración a un vigilante del tránsito. "Es que viene la Gorda, señora", resumió muy suelto de cuerpo el agente municipal. Y la señora se quedó en Babia. ¿Cómo "la Gorda"? Cuánta confianza, che.
| Cuando el humor se pasa de negro Los dichos discriminatorios del conductor de una radio venadense, reflejados en esta columna el pasado lunes, dispararon la lógica bronca de varios. Entre ellos la del organizador de un evento musical que se llevó adelante en el estadio Olimpia con la participación estelar del grupo tropical Sabroso. El conductor radial, de capilar apodo, había dicho "en joda" según su propia aclaración que "estaría bueno" que dos aviones repletos de nafta se estrellaran en el mismísimo estadio y a la hora del concierto. Ahora parece que, también "en joda", el organizador del evento tropical estaría preparando una fuerte réplica en los medios venadenses a los inapropiados, xenófobos y discriminatorios conceptos que lanzó al aire el incorregible locutor, cuyo sentido del humor deja bastante que desear. Qué querés que te diga, negro.
| | |  | "No confío en ningún juez, salvo honrosas excepciones" Julio César Strassera Ex fiscal en el juicio a las Juntas, en diálogo con La Capital | Ver noticia | |  |