Acorralados. Firmenich pidió eximición de prisión pero el juez la rechazó

Perdía y Vaca Narvaja negaron haber sido cómplices del Proceso

Los detenidos ex jefes montoneros Fernando Vaca Narvaja y Roberto Perdía negaron ayer ante la Justicia haber sido cómplices de la dictadura y dijeron ser víctimas de un "juicio político" presuntamente destinado a compensar los arrestos de militares que integraron el aparato represivo en los 70.

Desde España, en tanto, el ex mandamás de Montoneros, Mario Firmenich, reclamó la eximición de prisión ante el juez federal Claudio Bonadío. El planteo, que sería rechazado en las próximas horas, fue presentado en Buenos Aires por el abogado Gustavo Maradini Drago.

Tras ser indagados -en audiencias separadas- por Bonadío y el fiscal Oscar Amirante, Vaca Narvaja y Perdía quedaron detenidos en la Unidad Antiterrorista de la Policía Federal, imputados de presunta responsabilidad en el secuestro y desaparición de montoneros que en 1979-80 regresaron al país para participar de una contraofensiva a la dictadura.

Frente a los investigadores, Perdía dijo estar sometido a "un juicio político que no está fundado en la causa procesal sino en razones de Estado. El Poder necesita una compensación por lo que está produciendo en los estadios de la sociedad y este juzgado es instrumento de esa pretensión del poder".

Perdía se refirió así a las peculiares circunstancias de su arresto, que se produjo semanas después de que otro juez federal, Rodolfo Canicoba Corral, apresara a 40 militares requeridos por España bajo cargos de terrorismo de Estado y genocidio.

"No se ve la razón o el motivo por el cual tendríamos responsabilidad alguna desde el punto de vista penal en estos hechos. La única explicación lógica es que se trata de un juicio a la resistencia popular", expresó Perdía, según consta en el acta de la declaración.

Perdía, quien al igual que Vaca Narvaja fue detenido el jueves, llegó a Tribunales sonriente en un móvil policial sin identificación y, desde el auto, saludó con los dedos en V (símbolo de la "victoria peronista") a un grupo de seguidores que se congregaron en la sede judicial con pancartas en demanda de la liberación de los ex dirigentes montoneros.

Vaca Narvaja, en tanto, enunció que el proceso que instruye Bonadío "es un mamarracho", en un breve contacto que mantuvo con periodistas mientras atravesaba un pasillo del cuarto piso de Tribunales rumbo al despacho del juez, ante quien negó haber entregado a 18 militantes montoneros que en 1979 regresaron al país para participar de una contraofensiva a la dictadura y fueron atrapados.

"La conducción nacional (de Montoneros) efectivamente aprobó la vuelta al país de distintos grupos de compañeros. Estos compañeros se cuentan por centenas, muchos perdieron la vida, otros están vivos y podemos probar de un modo rotundo que la vida o la muerte en la lucha es una circunstancia que nace del compromiso voluntariamente asumido y no de ninguna mente diabólica que maquina entregas o formas de perjuicio", explicó Perdía.


Explicaciones coincidentes
Las explicaciones de Perdía, según fuentes judiciales, fueron coincidentes con los argumentos de Vaca Narvaja, quien al regresar al pabellón policial en el que está alojado difundió una carta en la que sostuvo que "no soy ni seré moneda de cambio".

Firmenich, en tanto, continuaba con paradero incierto y buscado por Interpol. Radicado en Barcelona (España), el ex líder de Montoneros estaba ayer a punto de ser declarado en rebeldía por Bonadío, pero su abogado en Buenos Aires dijo que su pupilo "siempre se ha presentado ante la Justicia y ahora hará lo mismo".

Marandini Drago dijo que "no tenemos aún el temperamento a adoptar con respecto a esta causa", pero sostuvo que "me sorprende sobremanera" la orden de captura de Firmenich.

Ante los investigadores, Perdía sostuvo que el único "delito" de la cúpula de Montoneros fue "el de resistir. Lo hicimos poniendo el pellejo. De estos hechos y la fuerza de otros sectores populares nació la débil democracia que todavía tenemos", y agregó: "En el desarrollo de esa resistencia también se cometieron errores, se hicieron múltiples autocríticas, colectivas e individuales".

Perdía indicó que 10 integrantes de la conducción montonera "fueron asesinados" y dijo que fue detenido para "satisfacer las demandas del poder político".

"Se sienta a las víctimas en el banquillo de los acusados usando el material y la información de los victimarios. No es esta la democracia por la que murieron 30 mil compañeros, creo que el Poder Judicial le hace un flaco favor al futuro insistiendo en esta línea de acción", subrayó.

Eduardo Soares, abogado defensor de Perdía, dijo no estar "sorprendido" de que "la Justicia federal sea permeable a los intereses políticos", y agregó que "los mismos jueces que fueron lacayos de Menem después crucificaron a aquellos que los sirvieron".

El letrado se quejó porque los ex dirigentes montoneros "están acusados por los mismos delitos por lo que están presos los militares".

Por su parte, la esposa de Vaca Narvaja afirmó que la detención de su marido es una "aberración jurídica" y que el ex jerarca montonero fue arrestado mediante una "emboscada, como en la época de la dictadura".

Tras la declaración indagatoria del ex líder guerrillero, Mery de Vaca Narvaja expresó el "asombro de nuestra familia por el modo de detención de mi esposo, una emboscada en el medio de la calle, con dos autos de civil. Me avisaron unos vecinos cuando llegué y me hizo recordar la época de la dictadura".

El ex montonero Perdía ingresa a Tribunales.