Asumieron tres jueces en el fuero penal tributario

Los juzgados fueron creados en 2000 pero nunca arrancaron. Una carta del gobierno contra la evasión

Los tres primeros jueces nacionales en lo penal tributario juraron ayer en una ceremonia en la que el ministro de Justicia, Seguridad y Derechos Humanos, Gustavo Beliz, reiteró que la lucha contra la evasión fiscal es un tema de "máxima prioridad" para al gobierno.

"Para el gobierno este es un paso más en la lucha encarada contra la evasión fiscal", señaló Beliz al término del acto de asunción de los tres magistrados, al que calificó como de "una alta importancia política", ya que se trata de un tema de "máxima prioridad" del Ejecutivo.

En un acto presidido por el procurador de la Nación, Nicolás Becerra, en el ministerio público, asumieron Javier López Biscayart, quien tendrá a su cargo el juzgado número uno; Diego García Berro, que se desempeñará en el número dos y María Verónica Straccia, que actuará en el número tres.

Los fiscales que trabajarán en estos juzgados serán Claudio Navas Rial, José Barbaccia y Jorge Dahl Rocha, quienes asumieron también en la oportunidad; mientras que el defensor oficial del fuero será Hernán de Llano, ex secretario del fiscal Carlos Stornelli en la investigación por la venta ilegal de armas.

La evasión fiscal y la corrupción fueron mencionados por el presidente de la Cámara de Apelaciones en lo Penal Económico, Marcos Gravitker, durante el acto de la jura como dos de "los males que sufrimos como sociedad".

El titular de la Cámara cuestionó a quienes utilizan la "corrupción como argumento para no cumplir con las obligaciones que todos tenemos como ciudadanos" y especialmente para incurrir en delitos de evasión fiscal que "impiden al Estado cumplir con su función específica".

En ese sentido instó el magistrado a la "responsabilidad individual" de cada ciudadano con miras a que "la suma de las mismas genere un cambio social, una sociedad que responsablemente cumpla con sus obligaciones".

Una colmada sala de audiencias de la Cámara contuvo a los familiares, amigos y colaboradores de los tres jueces, elegidos por concurso, que comenzaron desde ayer a recibir las nuevas causas que se inicien contra evasores al fisco.

Los juzgados nacionales en lo penal tributario fueron un proyecto ideado y aprobado en el año 2000 pero su implementación se vio demorada por cuestiones presupuestarias.

Los tres jueces fueron nombrados por decretos firmados por el ex presidente Eduardo Duhalde y tuvieron el acuerdo definitivo del Senado de la Nación este año.

Fuentes del fuero penal económico señalaron que cada uno de los jueces recibiría un promedio de 400 causas al año, que se dividen en aquellas por evasión fiscal (más de 100 mil pesos evadidos en un año) y las agravadas (por más de 1 millón de pesos en un ejercicio).

La puesta en marcha de estos juzgados específicos "disparan la previsibilidad del riesgo" que significa el incumplimiento de las obligaciones fiscales, comentó una fuente del fuero, tras considerar que habrá un efecto directo en el volumen de la evasión fiscal en Argentina que hoy se ubica entre los 20 y 30 mil millones de pesos anuales.

La Administración Federal de Ingresos Públicos (Afip), cuyo titular Alberto Abad asistió al acto de jura entre el público, resignó 8 millones de pesos de su presupuesto para este año para colaborar con la puesta en marcha de los juzgados en lo penal tributario.

En tanto se espera la concreción de otros tres juzgados federales de ejecución fiscal que para la opinión de Abad constituyen "el último proceso de la cobranza del crédito fiscal".

El acto fue presidido por Nicolás Becerra.