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 domingo, 13 de julio de 2003

Cafiero prometió terminar con el tráfico de autopartes en Buenos Aires
El ministro de Seguridad dijo que el robo de automotores moviliza 400 millones de pesos anuales

Buenos Aires.- Mientras el ministro de Seguridad bonaerense, Juan Pablo Cafiero, prometió ayer "terminar con el negocio de los desarmaderos truchos y el robo automotor" que, según advirtió, "moviliza 400 millones de pesos anuales" en la provincia, su par nacional Gustavo Beliz aseguró que los operativos y allanamientos continuarán en los próximos días.

El titular de la cartera de Justicia, Seguridad y Derechos Humanos consideró en tal sentido que "es muy importante que los jueces y fiscales acompañen ese esfuerzo".

En tanto, el secretario de Seguridad Interior, Norberto Quantín, puntualizó que en algunas áreas de la Capital, entre ellas la circunscripción séptima (del barrio de Villa Del Parque) los procedimientos "han dado muy buenos resultados y el número de vehículos robados ha descendido brutalmente por los operativos cerrojos".

El ex fiscal señaló que "hay una relación muy concreta entre la disminución de los robos de autos y el control que se hace en la (avenida) General Paz, que es la vía por la cual se va a los desarmaderos. Hemos cerrado esa vía y los resultados están a la vista ya".

Ayer se realizaron 23 operativos en diversos puntos de la Capital y del territorio bonaerense, para combatir el robo y el desguace de automóviles, el delito que provoca la mayor cantidad de muertos en hechos de inseguridad.

La iniciativa permitió el secuestro de miles de partes de unos 400 autos de procedencia presuntamente ilícita. Cafiero precisó que a partir de los procedimientos y allanamientos contra desarmaderos impulsados por el gobernador Felipe Solá desde diciembre del año pasado, "se secuestraron alrededor de 25 mil automóviles robados, mercaderías y repuestos por 30 millones de pesos y hay alrededor de 3 mil detenidos" entre ellos, algunos policías.

En ese contexto, Solá firmó en las últimas horas cinco decretos con el fin de combatir la ola de episodios de violencia. Cafiero confirmó que uno de ellos "da al Ministerio (de Seguridad) y a cada uno de los comisarios un control estricto en todo el Gran Buenos Aires" respecto a "la comercialización de productos automotores, lavaderos, talleres, comercios de venta de repuestos".

Asimismo, reiteró su reclamo al Congreso para que apruebe por ley la autorización del decomiso de propiedades de delincuentes y comerciantes, para "terminar con el negocio del robo de automotores que está plagado de sangre y muertes, con delincuentes en la calle y revendedores que incentivan este negocio". (DyN)

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