Unión se hunde irremediablemente en el descenso. Increíble. ¿Quién hubiera dicho que este equipo que venció a Boca, que derrotó a San Lorenzo en el Nuevo Gasómetro, que parecía encaminado, se derrumbara así como un castillo de naipes? Y no sólo ahora perdió con Independiente sino que exhibió la actitud de un equipo vencido, incapaz de reaccionar. Un rival ideal para Central en la próxima fecha. Encima, no cuenta ni con la magia de Capria. Sólo un milagro le permitirá evadir la pérdida de la categoría, aunque cuenta a su favor con que recibirá a Nueva Chicago en la penúltima fecha y es al único que podría alcanzar, ya que Talleres sigue mejor pese a perder. ¿Podrá reponerse a tiempo? Hummmm....
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La Ciudad
