Trasplantaron a dos niñas órganos de un mismo donante

Dos niñas del interior fueron trasplantadas con los órganos de un mismo donante en el hospital Garrahan de la Capital Federal y evolucionaban favorablemente, de acuerdo a un informe dado a conocer ayer por el equipo médico de ese centro asistencial. Lucía Pereyra, una niña de La Pampa, de 16 meses, recibió el corazón, y la correntina Daira Villanti, de tres años, el hígado, en dos cirugías que se practicaron el sábado pasado y para las cuales se movilizaron alrededor de cien personas.
El donante fue un niño que falleció el sábado pasado en la ciudad bonaerense de Quilmes, y luego de que sus padres decidieran donar los órganos, el Cucaiba desplegó un operativo que permitió salvar las vidas de Lucía y Daira, en lo que para el hospital Garrahan fue el trasplante número 844.
Lucía estaba en la lista de emergencia nacional del Incucai desde hace tres semanas, a la espera de un corazón, y llegó a la cirugía después de haber estado internada en terapia intensiva durante dos meses y con un peso de sólo seis kilogramos y medio.
El jefe de trasplante cardíaco, Horacio Vogelfang, puntualizó que su equipo está "muy satisfecho por lo que se pudo realizar" y resaltó que la paciente, de 16 meses, "comenzó a revertir su déficit de salud", a pocas horas de haberse practicado la operación.
La cirugía de trasplante cardíaco de Lucía duró cinco horas, en el marco de un operativo que comenzó a las 4 y finalizó a las 21 del sábado último.
La paciente llegó al quirófano asistida con respiración mecánica y drogas endovenosas inotrópicas, que permitieron sostenerle su función cardíaca debilitada.
Por su parte, el jefe del equipo de trasplante hepático, Oscar Imventarza, explicó que Daira, quien el sábado pasado recibió un hígado, "padecía una atresia de vías biliares y estaba descompensada".
Imventarza se manifestó conforme con el trasplante hepático número 308 que hizo el equipo del Garrahan y acotó que la paciente, que permanece en terapia intensiva, está "hemodinámicamente compensada, no recibe asistencia respiratoria y empezó a jugar en la cama con su madre".
La cirugía de trasplante hepático de Daira duró 13 horas y la paciente figuraba en la lista de urgencia del Incucai debido a la enfermedad hepática que padecía desde los dos meses de edad. (Télam)