Fue una tarde de locos. Después del 1 a 1 con Temperley, Argentino retornó al vestuario creyendo que su suerte estaba casi echada. Dentro de la cancha no hubo manifestaciones dramáticas ni nada que se le parezca. Sólo Hugo Iriarte se sentó en el césped en señal de resignación, mientras los ocho hinchas aplaudían a los jugadores y dejaban caer alguna lágrima de tristeza, todo al mismo tiempo. Pero cuatro minutos después, la radio les devolvió la sonrisa: Italiano le empató a San Miguel con dos menos en descuento y todo volvió a quedar más o menos igual. Ahora, Argentino deberá ganarle a Armenio y esperar que Atlanta y San Miguel no lo hagan en su visita a Tigre y Ferro (o empatar y esperar que los otros dos pierdan), para zafar del descenso directo y jugar la Promoción.
Los salaítos no sabían si festejar o lamentarse por el partido que dejaron escapar. Porque Temperley alcanzó la igualdad a 9' del final, después de que Argentino dilapidara cuatro chances claras.
Argentino evitó caer en ingenuidades ante un rival ideal porque no peleaba por nada y priorizó el equilibrio por sobre gestos audaces que pudieran costarle caro. Entonces Temperley tuvo la pelota, pero fue el equipo de Marini el que dispuso de la situación más propicia: un tiro de sobrepique de Genesio que impactó en el ángulo superior izquierdo del azorado Campodónico.
Si el capítulo inicial había sido más bien parejo, todo cambió tras el descanso. Convencido de que se le abrirían las puertas a través del contragolpe, Argentino siguió apostando por esa vía. Y como Temperley confundió entretiempo con larga siesta, pudo resolverlo en los 10' iniciales. Primero lo perdió García y después Vázquez -errático y desconocido- resolvió como un principiante dos jugadas propicias.
La merecida apertura llegó a los 20: Rubio metió un pelotazo largo, Sadauskas intentó despejar con un cabezazo que le salió para atrás y no hizo más que "asistir" a Iriarte, quien definió con frialdad. Argentino pudo aumentar en otra réplica profunda, pero Campodónico le ganó un mano a mano al ingresado Amaya. Más obligado por las circunstancias que convencido, Temperley atacó con mayor insistencia y sobre los 36' empató: cabezazo limpio de Cejas tras centro de Ismail. Después, Argentino quedó tan golpeado que las manos de Campestrini lo salvaron de sufrir una derrota casi lapidaria.
Si Argentino ganaba hubiera dependido de sí mismo en la última fecha, pero es cierto que así como no esperaban el empate de Temperley, tampoco que a San Miguel le igualaran en descuento. Ahora deberá esperar 7 días más para saber si el de ayer fue el empate que prolongó la agonía o el que le abrió las puertas a la Promoción.
Síntesis
Temperley 1: Campodónico 7; Sadauskas 4, Balanda 4 y G. Ortíz 5; Falcón 5, De Luca 5 (68' C. Delgado), Hure 6 y Robledo 4 (63' Ismail); Wisnieski 5; Cejas 6 y Blanco 4. DT: Julián Camino.
Argentino 1: Campestrini 7; Aceto 5, Sciretta 5 y Bassani 5; Raschetti 5, Rubio 6, Villarreal 6 (87' Giusti) e Iriarte 6; Genesio 5 (62' Chacón); García 5 y Vázquez 3 (76' Amaya). DT: Pablo Marini.
Cancha: Temperley.
Arbitro: Federico Beligoy (5).
Goles: 65' Iriarte (A) y 81' Cejas (T).
Expulsados: No hubo.