Año CXXXVI
 Nº 49.862
Rosario,
miércoles  04 de
junio de 2003
Min 2º
Máx 16º
 
La Ciudad
La Región
Política
Economía
Opinión
El País
Sociedad
El Mundo
Policiales
Escenario
Ovación
Suplementos
Servicios
Archivo
La Empresa
Portada


Desarrollado por Soluciones Punto Com






¿Fueron manipulados los servicios de inteligencia?

Washington. - Siete semanas después de la caída de Bagdad, aún no se hallaron armas de destrucción masiva en Irak ni pruebas concretas al respecto, mientras crecen los comentarios -sobre todo en el seno de la CIA- sobre la manera como la Casa Blanca habría deformado con fines políticos las evaluaciones del servicio secreto sobre la existencia de armas prohibidas en Irak y los supuestos lazos entre Bagdad y la red terrorista Al Qaeda. "El sentimiento general entre los analistas de la CIA es que la información fue politizada y que los informes provistos por la CIA y la DIA (inteligencia militar) no fueron tomados plenamente en cuenta porque el Pentágono, y los dirigentes políticos -incluida la oficina del vicepresidente- no querían escuchar ese mensaje", aseguró el ex jefe antiterrorista de la Agencia Central de Inteligencia (CIA), Vincent Cannistrano, con aceitados contactos en el organismo. "Aquello que querían escuchar era un duro mensaje que apoye una política decidida desde antes", denunció.
"Hubo una predisposición de esta administración de asumir lo peor con respecto a Saddam", declaró un ex funcionario militar a la revista Time. "Estaban predispuestos a ver e interpretar la evidencia de una forma particular para apoyar una convicción sostenida profundamente", agregó el funcionario recientemente retirado, que participó directamente en la planificación de la guerra. "Creo que tenía que haber algún punto de encuentro para los estadounidenses. Creo que lo dijeron sinceramente, pero también pienso que al final del día, nos daremos cuenta que las interpretaciones que hicieron de la inteligencia fueron incorrectas", afirmó.
En un artículo aparecido a mediados de mayo en la revista New Yorker, el periodista Seymour Hersh afirmó que una pequeña oficina de inteligencia en el seno del Pentágono, el Buró de Planes Especiales (OSP, por su sigla en inglés), desempeñó un papel principal en la determinación de los argumentos esgrimidos por Bush contra Irak. Creado por el número dos del Pentágono, Paul Wolfowitz, luego de los atentados del 11 de septiembre de 2001, el OSP pudo haber hecho hecho prevalecer en la Casa Blanca su afirmación de que los servicios de inteligencia no percibían con claridad la amenaza que representaban los iraquíes.
El OSP arribó a sus propias conclusiones, basándose en testimonios de exiliados iraquíes proporcionados por el presidente del Congreso Nacional Iraquí (CNI), Ahmed Chalabi. Estas conclusiones fueron mucho más alarmantes que las de los servicios de inteligencia, y daban cuenta de la amenaza de supuestas armas de destrucción masiva iraquíes y de lazos entre Saddam y Al Qaeda, afirmó Hersh en su artículo.
Según el ex jefe de la CIA, James Woolsey, se otorgó demasiado crédito a las afirmaciones de iraquíes desertores. "Una parte de lo que dicen es falso. La CIA no quiso utilizarlo. El Pentágono le prestó más atención. Veremos quién tenía razón", dijo.

Quejas internas
Miembros de la CIA elevaron tres quejas internas alegando una posible manipulación de la información por parte de la administración Bush, según un funcionario del organismo citado el sábado por The Washington Post. Los hombres de la CIA "están totalmente desmoralizados", confió al periódico Ray McGovern, un ex analista del organismo. Algunos incluso formaron un grupo para defender la reputación de los servicios secretos.
En un memorándum dirigido el mes pasado al presidente Bush y difundido esta semana en Internet, denunciaron "un monumental fiasco en materia de política y de inteligencia" y reclamaron una investigación sobre el hecho. El sábado, el director de la CIA defendió la credibilidad del organismo. "La integridad de nuestros procedimientos fue mantenida de punta a punta", afirmó George Tenet.
Un miembro de la Agencia de Inteligencia Militar (DIA), que afirmó a The Washington Post haber tenido acceso a la totalidad de los informes secretos sobre Irak, no duda en asegurar que "el pueblo estadounidense ha sido manipulado". (AFP)


Notas relacionadas
Emplazan a la CIA a brindar pruebas sobre las armas de exterminio en Irak
Preguntas abiertas
Diario La Capital todos los derechos reservados