La pronta eliminación de la selección nacional en el Mundial de Corea-Japón todavía sigue dando vuelta en la cabeza del Burrito como una dama encantada. Los brotes de impotencia se agigantan porque para Ortega no hay derrota más lacerante que la inesperada, no hay caída más frustrante que la que dinamita las ilusiones bien fundadas. -¿Ya arrancaste de tu pensamiento el fracaso del Mundial 2002? -No, es imposible olvidarse de eso. Sobre todo cuando sabés que tenías equipo para llegar lejos y hacer un buen mundial. Pero al final nos quedamos sin nada. Todos los que jugamos aquel fatídico partido contra Suecia nunca vamos a olvidarnos de la eliminación. Por eso cada vez que me preguntan acerca de ese tema, contesto que lo único que nos queda es tener la revancha en el próximo Mundial. -¿Creés que Bielsa te tendrá en cuenta para el 2006? -La verdad, no tengo ni idea que pasará. Sinceramente no te puedo contestar esa pregunta porque el único que tiene la respuesta es Bielsa. -¿Lloraste después del empate contra los suecos? -Fue un golpe durísimo para el grupo. Nos dolió quedar afuera de esa manera porque fuimos convencidos de hacer un gran mundial y nos vinimos en la primera ronda. -¿Está bien decir que para ese grupo de jugadores haber quedado eliminados del mundial en la primera fase fue la mayor frustración deportiva? -Particularmente no me gusta utilizar la palabra fracaso porque el equipo no mereció quedar eliminado. En todos los partidos fuimos al frente, merecimos ganar, pero lástima que no se nos dio. -¿Creés que este tiempo sin jugar te quita posibilidades para integrar el nuevo proceso de la selección? -Espero que no. Cuando vuelva a jugar en River y me ponga bien físicamente, la camiseta de la selección es mía. -¿Tuviste contacto con Bielsa en los últimos meses? -No, hace mucho que no hablo con él. Pero antes cuando jugaba tampoco tenía mucho contacto. -¿Hizo bien Julio Grondona en renovarle el contrato? -Sí, porque haber quedado afuera del Mundial no significa que Bielsa haya hecho un mal trabajo. Todo lo contrario, es una persona muy honesta y que en los años que está en la selección ha demostrado capacidad para preparar al equipo.
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