Típica práctica previa a un partido. Como se sabía que el equipo titular ante Lanús iba a ser el mismo que perdió con Boca pero que le ganó a San Lorenzo, Veira dedicó la hora y media de ayer a la mañana en una de las canchas auxiliares de Español para refrescar conceptos y explicarles a los once dentro del campo de juego cómo se puede vulnerar la resistencia de los granates. Por eso después de una sesión muy liviana de ejercicios con pelota, que incluyó el acostumbrado tenis-fútbol, el entrenador de Newell's se cruzó a la cancha de mejor césped y paró a los titulares con un adversario imaginario. En todo momento el conductor los arengó para que presionaran y en un pasaje de la ejercitación citó a aquel Milan de Arrigo Sacchi como el ejemplo a seguir para recuperar y hacer circular la pelota. "Muchachos, el gran secreto de ese Milan era que recuperaba rápido la pelota y después cuando la tenía jugaba", fue el latiguillo anímico que esta vez eligió el Bambino para meterle en la cabeza a sus dirigidos el plan anti-granate. Luego llegó el turno de las jugadas con pelota detenida. En ese rubro los que más indicaciones recibieron fueron Manso y Rosales, quienes lucieron como los encargados de pegarle a la pelota cuando el tiro libre se producía cerca del área rival.
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