Real Madrid derrotó ayer a la Juventus por un exiguo 2 a 1, en una de las semifinales de la Liga de Campeones de Europa, que fue muy pareja y que deja la eliminatoria pendiente de la revancha en Turín.
El técnico madrileño Vicente del Bosque sorprendió con su alineación al dejar en el banco al volante inglés Steve McManaman e incluir al atacante Fernando Morientes, haciendo pareja con el brasileño Ronaldo. Así, el Madrid pasó a jugar con la inusual cifra de cinco jugadores de corte acusadamente ofensivo.
Y lo cierto es que esta idea le dio resultado al Real, que se adelantó en el marcador con ese diseño, tras una pared de Morientes que acabó en la pierna derecha de Ronaldo, quien definió a los 23' con su habitual maestría.
Tantos delanteros le privaron al equipo blanco de la pelota, que apenas pasó por los pies de Guti. Pero Juventus no se siente cómodo con el balón y, a pesar de su dominio, apenas se acercó al arco merengue.
A punto estuvo Real de marcar el segundo tanto a sólo dos minutos del entretiempo, tras una nueva combinación entre Ronaldo y Morientes, que terminó con un disparo alto del español.
Pero la Juventus volvió a demostrar su capacidad para asestar golpes psicológicos. Tras la chance de Morientes, y en una jugada sin aparente peligro, el balón le llegó al delantero francoargentino David Trezeguet, quien libre de marcas situó el empate antes del descanso.
La Juventus tenía el partido donde quería, con un magnífico resultado que además le permitía jugar como más cómodo se siente: muy junto atrás y a la espera de cazar un contraataque.
Real Madrid sufría muchísimo, con un equipo muy descompensando, poco apto para la elaboración del juego ofensivo y para fijar las marcas en defensa.
Pero justo cuando la hinchada blanca olía el gol italiano, fueron los merengues quienes se adelantaron, gracias a un sensacional disparo cruzado de Roberto Carlos.
Juventus tampoco arriesgó en el tramo final del encuentro y a punto estuvo de recibir otro tanto en la última ofensiva del Real Madrid, que sacó toda la artillería para intentar ampliar la diferencia. Pero el marcador permaneció igual y la eliminatoria se resolverá la semana próxima en Turín.
Al equipo italiano le bastará ganar por 1-0 para consagrarse finalista, pero Real Madrid clasificará con sólo empatar, en un choque que promete emociones fuertes.
| |
La Ciudad
