El candidato a presidente por el Frente para la Victoria, Néstor Kirchner, anticipó anoche que el ministro de Economía de su eventual gobierno será el actual titular de la cartera de Hacienda, Roberto Lavagna.
"Mi decisión es esa", dijo Kirchner al confirmar que Lavagna estará en su gabinete si triunfa en las elecciones de abril, en un reportaje concedido al programa "A Dos Voces", de TN.
Kirchner había dado señales en ese sentido durante la grabación del programa "De ahora en más", que se emite por Canal 5, aunque apareció en vivo en los estudios de TN para reforzar la cuestión.
"El único responsable (luego dijo "ministro") decidido que tengo para trabajar en el sector económico es Lavagna", reveló el santacruceño. También comentó que no hará "cambios intempestivos" en el Banco Central y que "gobernará mirando al pueblo y no al establishment". Luego remató: "No voy a ser empleado de la patria financiera".
Kirchner dedicó unos cuantos minutos para criticar a Menem, pero trató con cierta delicadeza a Adolfo Rodríguez Saá. "Si por carisma se entiende la seducción para llevarnos al infierno, ya tenemos demasiadas pruebas", señaló en obvia referencia al riojano. "Cuando voto un gobierno es para que gobierne, cuando quiero ver un programa artístico pongo un programa de espectáculos", ironizó luego.
Visiones distintas
Sobre el puntano, confesó que tiene "una relación de respeto", aunque no tardó en diferenciarse: "Tenemos visiones, personalidades y responsabilidades distintas".
Al analizar la situación del PJ, dijo que "por un lado está el justicialismo que construyó Menem, aliado con los capitales concentrados de la economía, que en el orden internacional está representado con Thatcher, y en el nacional con personas como María Julia, Alderete y Kohan, y por el otro, la alianza entre el capital y el trabajo, la alianza policlasista, la idea de recuperar la movilidad de los sectores medios".
Al referirse a la educación, señaló tanto la necesidad de hacer un nuevo congreso educativo como de recuperar el rol del docente y la cuestión salarial. "Hay que darle una funcionabilidad como corresponde al presupuesto educativo", señaló.
En materia económica, si bien dijo no ser partidario de las retenciones al agro, estimó que "no se pueden sacar de golpe". Luego aseguró que hace falta una reforma financiera para "devolver el crédito" y que se debe "redefinir la banca privada y la pública". Sobre esto, se manifestó "defensor de la banca pública, la que debe llegar a todo el país".
Kirchner no dejó de comentar que, si bien le "conforma" el actual sistema constitucional "le haría una reforma más: que no haya posibilidad de reelección (del presidente)". Consultado sobre quiénes llegarán a la segunda vuelta, concluyó estarán "los dos proyectos en disputa", por el suyo y el de Menem.
La senadora Cristina Fernández de Kirchner fue recibida ayer a huevazos por un grupo de militantes peronistas que repudió así el impulso que la legisladora dio en el Congreso al pedido de expulsión de su colega Luis Barrionuevo.
La santacruceña no sólo fue víctima de un escrache en Catamarca, las 62 Organizaciones Gremiales Peronistas emitió un comunicado de repudio en el que calificó a la legisladora como "soberbia" y "pseudoperonista".
"Llévese de Catamarca nuestro desprecio y el deseo ferviente de que se aleje del peronismo y de los peronistas, por el bien de quienes realmente amamos a Perón y a Evita", concluyó el escrito.