Una mujer de 83 años murió ayer a raíz de las lesiones que sufrió luego de haber caído al vacío por la abertura del ascensor de un geriátrico. La institución, ubicada en el barrio Saladillo, había sido denunciada hace una semana por no cumplir una clausura y funcionaba "clandestinamente", aseguró la directora de Registración e Inspección de la Municipalidad, Rosa Acosta. No obstante y paradójicamente, seguía abierto. Pero además, el elevador no figura en los registros oficiales, por lo cual no cumplía con las reglamentaciones (ver aparte).
Alicia Viceconti cayó el viernes por el hueco del elevador del geriátrico El Descanso SRL, ubicado en avenida del Rosario 135 bis, una institución que no tenía habilitación según confirmó la Municipalidad. "Me llamaron el viernes a la noche para avisarme que mi mamá había sufrido un accidente", dijo a La Capital la hija de la víctima, Alicia La Femina, antes de agregar que "abrió la puerta del ascensor y se precipitó al vacío". La mujer fue conducida en una ambulancia al sanatorio Plaza donde fue internada en terapia intensiva.
Mientras tanto, su hija radicó una denuncia para que se investiguen las circunstancias del deceso.
Al parecer, la anciana confundió la puerta del aparato con la de un placard y, al abrirla, sufrió un mareo y se desplomó, por lo que se fracturó el cráneo y tuvo politraumatismos, según fuentes de la comisaría11ª donde quedó radicado el sumario policial.
Según la denuncia que asentó la hija de la víctima, esa fue la explicación que le dieron en el geriátrico, no obstante reclamó que se investigue el caso para saber si el accidente obedeció a "un desperfecto en la puerta del ascensor o bien a negligencia del personal encargado de atender a los ancianos".
La paciente llegó al centro asistencial en gravísimo estado con paro cardiorrespiratorio y falleció a la 1.45 de ayer. Es que no evolucionó bien con el correr de los días.
Sospechas de los familiares
"Me extraña mucho el argumento de la encargada del geriátrico porque dijo que mi mamá forzó la puerta del ascensor hasta romper la traba; no creo que una mujer de 83 años pueda hacer eso", sostuvo La Femina. En rigor, supuso que "la puerta estaba mal cerrada o la traba no funcionaba".
Por eso se ocupó de hacer "públicamente un llamado de atención sobre las situaciones que pueden presentarse en este tipo de lugares y el cumplimiento o no de las medidas de seguridad".
En este sentido, la directora de Registración e Inspección dio cuenta de las irregularidades que enmarcan al geriátrico en cuestión. Afirmó que el 27 de marzo pasado la repartición hizo una denuncia policial -también en la seccional11ª- por violación de clausura. Es que sobre la entidad pesaba esa resolución y, sin embargo, se había admitido el ingreso de 5 pacientes más.
La institución alberga a unos 12 abuelos pero nunca estuvo habilitada. Carecía de final de obra y tampoco cumplía con las condiciones mínimas de seguridad.
Desde su apertura, en el 2000, la empresa no cumplió con los requisitos que establecen las ordenanzas municipales por lo que se la intimó a "ponerse en órbita", dijo Acosta. En efecto, sólo respetó una mínima parte hasta que fue clausurada, lo que en la práctica significa que no deben entrar más internados pero puede seguir funcionando.
"A pesar de eso, constatamos que los empresarios permitieron el ingreso de más abuelos, entonces procedimos a radicar la denuncia policial", indicó Acosta. Más aún, la comisaría elevó el hecho al juzgado de faltas Nº 2.
La funcionaria consideró que "no es sencillo desalojar a los ancianos ya que su permanencia corresponde a un acuerdo entre privados".
Las falencias del geriátrico El Descanso no terminan. Desde el Departamento de Ascensores y Elevadores de la Secretaría de Servicios Públicos municipal, reconocieron que el ascensor nunca fue registrado en la repartición. El titular del área, Eduardo Luciani, fue gráfico: "No figuraba en ningún lado", dijo y describió, por ejemplo, que no tenía guardapié y las puertas no eran las reglamentarias. Se trataba de un aparato llamado de una sola parada que ascendía a un primer piso.
Luego de ocurrido el accidente, inspectores de la dependencia se hicieron presentes en el geriátrico y lograron ver el elevador, aunque los controles no fueron exhaustivos debido a la presencia de la policía y el malestar que se vivía en el lugar.
La Ciudad
