Funes. - "Pensé que aquí íbamos a poder estar tranquilos y hoy me encuentro en una plaza compartiendo una reunión por la inseguridad", dijo una mujer, que hace apenas un mes y medio se radicó en Funes en un intento por escapar de la gran inseguridad de Rosario. Anteanoche, más de cincuenta vecinos se reunieron en una plaza céntrica de esta ciudad para debatir sobre el problema que les quita el sueño: una ola de robos. Reclamaron más y mejores controles, afirmaron que los robos han aumentado por carencia operativa de las fuerzas públicas y anunciaron nuevas movilizaciones hasta que sus requerimientos sean resueltos.
Uno de los motivos fundamentales de la bronca por los delitos recientes es que "todos sabemos quiénes son los ladrones y, aunque más de una vez se informó a la policía sobre los autores, después no pasó nada", se quejaron. Incluso aseguraron que "uno vive pegado a la comisaría".
Como receptor de las quejas se presentó espontáneamente en la asamblea el inspector zonal de la Unidad Regional II de la policía, Alberto Antegiovanni. Los vecinos denunciaron no ser escuchados como ellos quisieran y recriminaron que en la anterior reunión pública "la policía prometió soluciones que no llegaron".
"Los móviles están casi siempre parados frente al comando radioeléctrico", denunció uno, mientras otro -que fue robado en dos oportunidades- acotó que la primera vez que avisó al comando "no vinieron y la segunda vez los obligué, porque les dije que si no asistían llamaría a los Tribunales".
"Estamos cansados de que nos digan que no tienen combustible o que los móviles o las motos no están disponibles", enfatizaron, al tiempo que destacaron -al borde de la indignación- que "uno de los robos se produjo en una casa cuyos fondos lindan con la comisaría".
Otra víctima de un robo contó que se acercó al comando para denunciar a un sujeto que le había desvalijado la casa. "Peregrinar en busca de respuestas por la comisaría y el comando sin que me escuchen fue una experiencia traumática", señaló.
Inquietudes
A medida que se hacían explícitas las sospechas hacia la actitud de policías "que saben quiénes son los ladrones y no hacen nada", el inspector Antegiovanni les pidió a los manifestantes que "sean mis ojos ante las equivocaciones y errores funcionales" y les facilitó un teléfono para que se comuniquen inmediatamente con él. En ese sentido, el funcionario policial dijo a La Capital que trasladará las inquietudes a sus superiores y remarcó que "la presencia policial en la calle, la labor a consciencia y el trabajo eficiente junto a la prevención simplifican las situaciones que están remarcando los vecinos".
Los presentes también arremetieron con sus críticas contra los jueces, en especial los del área de la minoridad, "que a pesar de tener expedientes de menores que son reincidentes, los largan enseguida". No faltó quien propusiera "presionar ante la Justicia para que aplique mano dura en estos casos". Al respecto enfatizaron que muchos de los ladrones son menores adictos y afirmaron que "la droga los lleva a ser cada vez más peligrosos".
Propuestas
Los asistentes a la asamblea habilitaron una urna donde los vecinos pudieron depositar sus propuestas. Por ejemplo, que haya puestos policiales fijos con garitas y una presencia de efectivos en las calles durante las 24 horas. También remarcaron que resulta necesario el arreglo de las calles para que los móviles policiales puedan circular, que hay que mejorar el alumbrado público y que se podría formar una comisión de vecinos representantes de los damnificados "para ejercer más presión ante un caso de robo".
También remarcaron que en el centro roban electrodomésticos y en la zona residencial las preferencias son las bombas de agua y equipos de piletas. Por su parte, quienes viven en las zonas más alejadas destacaron la importancia de "estar comunicados permanentemente para alertarnos ante la presencia de extraños sospechosos". Otra sugerencia fue que una comisión integrada por vecinos maneje los fondos destinados a la seguridad que se cobra en la tasa municipal.
Una propuesta emanada de la policía fue "implementar un sistema conocido como policía comunitaria, donde la participación de la población es fundamental". Asimismo, el inspector regional aclaró que hay que dar respuestas con los medios con que cuenta la fuerza, es decir: cuatro vehículos y dos motos en el comando, y un móvil en la seccional 13ª.