Pogliese, el jefe de Rosario

Ayer a las 12.30 el comisario mayor Luis Roberto Pogliese se convirtió en el nuevo jefe de la Unidad Regional II. En el mismo acto también asumió quien lo secundará en la sede rosarina, el comisario mayor Luis Selak. El flamante titular de Rosario no dio ayer novedades sobre cómo quedará compuesta la cúpula. Y se comprometió a trabajar desde el primer día en un plan de seguridad preventivo que, según dijo, se basará en el reforzamiento del patrullaje en las zonas más conflictivas de la ciudad.
Rosarino de barrio La Florida aunque con residencia en Funes, aficionado a la natación y de 52 años, Pogliese tomó su puesto del saliente comisario mayor Jorge Pupulín, que pasará a retiro. Hizo toda su carrera en Rosario, a excepción de los últimos 14 meses, que pasó en Santa Fe a cargo de la Dirección de Drogas Peligrosas. Sus colegas aseguran que conoce bien la calle porque como oficial superior pasó buena parte en dos secciones de la Agrupación Cuerpos: fue jefe del Comando Radioeléctrico y la Brigada de Orden Urbano.
"Asumo el compromiso de trabajar de manera constante para brindar seguridad y prevención a algo más de un millón de personas que viven en el departamento Rosario", sostuvo el nuevo jefe, que lució temperamento sereno y vocación de diálogo. Pero no adelantó sus directivas más allá de formulaciones generales. "Vamos a brindar prevención general en un marco difícil. El personal policial se esfuerza durante no menos de 10 horas. Y nadie ignora cómo se incrementó la violencia especialmente en los menores. Por eso venimos a trabajar", subrayó.
Este diario le preguntó si le constaban los señalamientos coincidentes de vecinos de varios barrios que atribuyen la mayor criminalidad en sus zonas a la protección que reciben ciertos delincuentes de ciertos policías. "Yo no tengo conocimiento de eso. Pero si tuviera procedería como marca la ley. Las personas que no guardan la conducta debida serán investigadas", señaló.
También se le preguntó cómo va a proceder ante dos delitos que se exasperaron en el último año en Rosario sospechados de gozar de tolerancia policial: el robo de vehículos y el bolseo de cereal. "Lo que voy a hacer es trazar un diagrama de patrullaje permanente en caminos comunales, provinciales y nacionales para evitar este tipo de robos y hechos de piratería del asfalto".