Los eructos y exabruptos del general amigo de la cerveza

Caracas. - Luis Felipe Acosta Carles, el general de la militarizada Guardia Nacional de Venezuela que dirigió el allanamiento al depósito de la distribuidora de Coca-Cola, puso su sello personal en el operativo con un ronco eructo ante las cámaras de los principales canales privados opositores.
Una vez que ingresó a las instalaciones de la estadounidense Panamco, y delante de una pila de cajas de malta (cerveza), Acosta Carles sacó una botella, la alzó como un trofeo, bebió y eructó ante los micrófonos de los periodistas, en el estado de Carabobo (100 km al oeste de Caracas)."Señor, ¿eso no es mala educación?", preguntó una atónita periodista. "Perdón, fue un instinto porque estaba caliente (la bebida), usted me dijo que teníamos mala educación y para estos efectos somos maleducados", replicó el general.
La imagen comenzó a ser repetida por las televisoras privadas, que en su totalidad reivindican abiertamente el paro iniciado el 2 de diciembre.
"Y mañana (por hoy) liberamos a la catira (cerveza rubia, marca Regional), y después al oso (cerveza Polar). ¿A ustedes no les gusta la cerveza?", preguntó irónico a los periodistas el militar, refiriéndose a las principales cervezas del país, que son llamadas así popularmente. "Esto es del pueblo. ¿Qué para dónde me llevo todo esto? Para el pueblo, señores, no nos vamos a apropiar de esto", bramó el general antes de pasearse por todas las salas del enorme depósito.
Siempre ante las cámaras, incluso dando saludos, con una sierra empezó a limar los candados de los almacenes que estaban cerrados. Luego otros efectivos subieron en uno de los grandes camiones de Coca-Cola para manejarlos y como otros guardias nacionales, Acosta Carles se encaramó por la parte de afuera del vehículo, sujetado de la ventanilla, y miraba con postura de héroe ante las cámaras de televisión a las que hacía señales de despedida con su mano libre.
Poco después la Guardia Nacional, en un operativo al mando del mismo militar, allanó la principal cervecera del país, la Polar. El general Acosta Carles volvió a dar su grito de guerra, otro eructo -o un simulacro de él-, cuando alzó una botella de malta sin alcohol, la mostró a los medios y clamó: "Este es un producto de primera necesidad para los niños y la tienen aquí acaparada y eso es un delito". (AFP)