Nadie puede poner en tela de juicio que su pasión por Central no tiene límites. De muy pibe se aferró a los colores canallas y en cada oportunidad que tuvo para demostrar que era un guerrero de ley lo hizo sin tapujos. Encima no sólo se dio el lujo de hacer las inferiores en el club de sus amores sino que además llegó al mundo de profesionalismo vistiendo la casaca auriazul, como muchas noches había soñado años atrás. "Cuando puedo escucho los partidos por radio. Sufro como loco pero vale la pena", afirmó el Colo, quien aún conserva una cadena con el escudo de Rosario Central a pesar de que su presente se llama Nantes.
-¿Cuando entrás a jugar te sacás la cadenita?
-Sí (risas), pero porque allá está prohibido.
-¿Y qué te dicen tus compañeros o el técnico?
-Se ríen o me dicen que lo llevo muy adentro y yo les respondo que como ellos son hinchas de algún equipo francés, yo soy fanático de Central.
-¿Sufrís mucho con el momento de Central?
-Sí. Estaba contento porque habíamos empezado muy bien pero cuando caímos en ese pozo era sufrir y sufrir nomás.
-¿Más que cuando eras jugador del club?
-Puede ser. Porque cuando yo jugaba no peleábamos por nada. No teníamos equipo como para ganar el campeonato ni había problemas con el descenso. Todo era más tranquilo. En cambio ahora uno sufre porque es hincha y le disgusta ver a su equipo en la situación en que se encuentra.
-¿Lo seguís por Internet?
-Más que por Internet lo sigo a través de la radio.
-¿Cómo hacés?
-La llamo a mi novia y le digo que ponga la radio en el teléfono. Así fue como pude escuchar el último clásico, que dicho sea de paso estaba como loco del otro lado de la línea.
-Además ahora hay varios chicos que hicieron las inferiores con vos.
-Sí, y eso me pone muy contento. Por ejemplo jugué mucho tiempo en las inferiores con el Loncho (Ferrari) y el Emi (Papa). También están el Sapito Encina y ahora asomó el Colorado Fassi, que si bien no jugué con él es de mi misma categoría.
-¿Hablás con algunos de ellos para estar más al tanto de las cosas que están pasando dentro del plantel?
-Con Ferrari lo hice poco y nada porque se ve que es muy duro con la computadora. Una vez me mandó un e-mail que parecía un telegrama. Le contesté con media página y nunca más me escribió. Me parece que el Loncho no sabe usar una compu.
-¿Te hubiera gustado quedarte más tiempo en el club?
-Seguro. Por lo menos un año más. Pero estas cosas uno no las puede manejar.
-Cuando hablás con algunos amigos que todavía están en las inferiores y te cuentan las necesidades que pasan o la desatención que tienen con ellos, ¿qué cosas pasan por tu mente?
-Que sigue todo igual. Ojalá que ahora con la llegada de Timoteo Griguol cambien las cosas. Desde mi punto de vista deberían brindarle más atención a los jugadores de las inferiores.
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La Ciudad
