El gobierno no accedió a fijar un índice de ajuste por inflación para calcular el impuesto a las ganancias que solicitaron los dirigentes del sector agropecuario, que anunciaron el inicio de movilizaciones para apoyar su reclamo.
Así lo expresaron anoche los representantes de las cuatro entidades agropecuarias tras reunirse con el ministro de la Producción, Aníbal Fernández. El encuentro fue precedido de un cónclave del que participaron todos los integrantes de la cadena agrocomercial, incluidos exportadores, industriales, productores, proveedores de insumos y las Bolsas, para analizar la ofensiva impositiva que se expresa no sólo en la falta de ajuste por inflación sino en el paquete impositivo que está trabajando el Congreso.
La negativa oficial
En el marco de esa convocatoria, realizada en un hotel porteño, suna avanzada integrada por representantes de la producción primaria se desprendió para entrevistarse con Fernández. Los representantes de la cadena agrocomercial ya habían intentado sin éxito en los últimos días reunirse directamente con el presidente Eduardo Duhalde.
En cambio, los recibió Fernández, quien no pudo torcer la decisión ya tomada del ministro de Economía, Roberto Lavagna. "Economía no quiere cambiar la forma de cobro del impuesto a las ganancias y no acepta el índice de ajuste por inflación", afirmó el presidente de la Confederación Intercooperativa Agropecuaria (Coninagro), Mario Raiteri, al término del encuentro.
Raiteri señaló que el "el resultado de la reunión fue negativo porque no obtuvimos una respuesta satisfactoria al problema fundamental que es la carga impositiva", y agregó: "Fernández nos dijo que había hablado con Lavagna pero sin ningún resultado".
Las entidades en guerra
Para Pablo Orsolini, vicepresidente de Federación Agraria, "es absurdo pretender cobrar un impuesto por una ganancia ficticia que se logró con la revalorización de los bienes a partir de la inflación, pero no se convirtió en un ingreso efectivo".
El dirigente de la FAA señaló que "tampoco se obtuvo una respuesta satisfactoria para el caso de los endeudados, que no pudieron acceder a los bonos para saldar sus cuentas y ahora están amenazados por los bancos".
Las entidades también llevaron un tema que preocupa a los productores primarios: el antidumping que la empresa Monsanto presentó contra la importación de glifosato de China y que los dirigentes del sector ven como un intento de monopolizar el mercado. Según señaló, tampoco hubo respuesta.
En un síntoma del deterioro comienza a producirse en la relación ente el gobierno y el campo,Una relación históricamente conflictiva y plagada de contradicciones, Orsollini anticipó que hoy se realizará una movilización en Casilda con productores agropecuarios, comerciantes y profesionales "preocupados por el aumento de la presión tributaria que va a hacer perder lo poco que ganó el campo con la devaluación".
En las poblaciones del sur santafesino este veranito agrario trajo cierto optimismo, ahora opacado por estas alternativas.
Al finalizar el encuentro, los dirigentes acordaron redactar en conjunto una declaración que difundirán hoy "para exponer los puntos de vista del campo y la familia agraria" y tomar contacto con legisladores de la Comisión de Presupuesto y Hacienda de la Cámara de Diputados, para tratar de "torcer el brazo" al Palacio de Hacienda.
La Ciudad
