El radicalismo sigue dando la nota escandalosa después de las internas del domingo y hasta anoche Leopoldo Moreau y Rodolfo Terragno seguían adjudicándose la victoria cuando las mesas escrutadas no eran demasiadas e incluso se desconocía si se habían computado distritos tan importantes como Buenos Aires y Córdoba.
A medida que aparecían datos de la junta electoral nacional partidaria, Moreau aseguraba que había ganado, Terragno discutía esas cifras, y muy poco después daba otras que consignaban su victoria.
En un marco de total confusión y hasta asombro por la situación planteada si se tiene en cuenta que para la noche del domingo se esperaba que el partido tuviera su candidato presidencial, alrededor de las 22.30 la junta electoral anunció que pasaba a un cuarto intermedio hasta hoy a las 16.
Todo también caracterizado por denuncias cruzadas de fraude en distintos puntos del país, en especial en Chaco -la provincia gobernada nada menos que por el presidente del comité nacional de la Unión Cívica Radical, Angel Rozas-, que agregan enfrentamiento entre los dos sectores.
Como en un tablero mágico los cómputos variaban de un lado a otro a medida que se acercaba la noche. A las 21.34 la página de internet de la UCR le otorgaba 191.200 (50,12 por ciento) a Terragno, mientras que a Moreau se le asignaban 187.499 (49,15 por ciento).
Por lo tanto, hasta este último cómputo Terragno se imponía por 3.701 votos, cuando -para algunos- sólo faltaban escrutar los distritos de Santiago del Estero y Mendoza.
Por la tarde, los datos proporcionados por la junta electoral nacional, escrutadas el 33 por ciento de las mesas, daban el triunfo a Terragno por alrededor de cinco puntos de diferencia. Poco más tarde el conteo sobre el 40 por ciento de las mesas revertía la tendencia y Moreau aventajaba al porteño por 12 mil votos.
Sin embargo, a las 21.34 era Terragno el que se imponía por 3.701 sufragios. Poco después, cuando se esperaba cualquier variación en los guarismos, la junta electoral resolvió el cuarto intermedio.
Y la atención seguía centrada en el Chaco porque Terragno acusaba a Rozas de manipular los datos para facilitar el triunfo de Moreau en esa provincia.
El porteño no sólo puso en duda el resultado de la compulsa, sino también la cantidad de votantes por lo que (aunque sus representantes en territorio chaqueño admitieron la victoria de Moreau, aclararon que "no fue por un porcentaje tan alto como Rozas dice") adelantó que impugnará el comicio en ese distrito aunque resulte vencedor en la interna.
Ante esta situación, la Juventud Radical que dirige Alejandro Rabinovich, no tardó en reaccionar y pidió "un paso al costado" de Rozas a la presidencia de la UCR a fin de "reconstruir el partido de cara a la sociedad".
El chaqueño prefirió mantener el silencio y sólo convocó a una conferencia de prensa para hoy a las 11.30 en Resistencia.
Roberto Rinaldi, presidente de esa junta electoral justificó la demora en dar a conocer nuevos datos del escrutinio en que "algunas provincias optaron por el criterio de dar los resultados cuando la información la tienen en forma total y otras van dando la información parcialmente".
Sobre la situación planteada en el Chaco, Terragno expresó "sorpresa" porque "en la provincia de Buenos Aires, que reúne al mayor porcentaje de afiliados radicales en relación a su población, votaron 127 mil afiliados, mientras que en Chaco lo hicieron entre 80 y 90 mil".
Terragno es como Cavallo
Moreau no sólo desestimó las denuncias de su competidor sino que lo comparó con el ex ministro de Economía Domingo Cavallo cuando denunció, en forma fallida, fraude en la elección que perdió a manos de Aníbal Ibarra para la jefatura de Gobierno porteño en el 2000.
La cosa llegó al extremo de que el diputado bonaerense Ricardo Alfonsín tuvo que hacer un llamado para calmar las aguas y pidió "seriedad y responsabilidad de los dirigentes en cuanto a las discrepancias que los comicios internos han generado entre los alineamientos de las respectivas candidaturas".
La Ciudad
