La interna del justicialismo también sacude al Senado

"Acá aprobamos todo lo que nos pidieron. El gobierno no se puede quejar", se jactó uno de los máximos referentes del bloque de senadores justicialistas cuando la tarde del viernes marcaba que había terminado con éxito la extenuante maratón de leyes electorales. Pero la satisfacción de uno de los hombres que con más frecuencia habla con el presidente Eduardo Duhalde y sus ministros tuvo un costo que se empezó a hacer notar: el clima en el bloque del PJ empezó a enrarecerse y hay legisladores que ya no ocultan sus diferencias.
A tal punto llegó la tensión que, por primera vez, hubo un intento de escisión concreto, protagonizado por Eduardo Menem, quien ante sus pares dijo sin eufemismos: "Yo no me siento representado por la conducción de este bloque".
Cerca suyo, el destinatario de la frase, el sanjuanino José Luis Gioja, se dedicó a dimensionar la magnitud de la declaración y recién respiró aliviado cuando notó que los que avalaban incondicionalmente ese movimiento eran menos de los podían haber sido.
La salteña Sonia Escudero respaldó con vehemencia la posición del riojano, y su comprovinciano Marcelo López Arias advirtió que "para mantener la unidad hay que debatir orgánicamente todos los temas, y acá no lo estamos haciendo".
El resto de los menemistas, como Ada Maza, Marcelo López Arias, Carlos Verna, Deolide Gómez de Bertone y Mario Daniele, no intervino directamente en los cuestionamientos.
Si bien parte de las críticas estuvieron dirigidas al informal modo de conducir de Gioja, la mayoría de los senadores interpretaron los planteos como una profundización de la estrategia de confrontación que el menemismo adoptó contra el duhaldismo.
A los que integran su entorno, el sanjuanino les dijo que precisamente el estilo informal del que lo acusan "es la única manera de llevar adelante un bloque que no es un liceo de señoritas y que está dividido en mil partes por la interna grande".
Fuera del menemismo también hay señalamientos contra el rumbo del bloque. Hace ya un par de meses la tucumana Malvina Seguí hizo planteos rupturistas en la cara de Gioja.
En los últimos tiempos Gioja tuvo cortocircuitos hasta con el presidente provisional del Senado, Juan Carlos Maqueda, quien responsabilizó a gente de su entorno de "hacer operaciones" en su contra.