Arsenal de Sarandí fue mucho más que un debilitado San Lorenzo, que jugó con suplentes, y lo venció merecidamente por 2 a 1 en el Nuevo Gasómetro. Los goles del equipo que conduce Jorge Burruchaga fueron convertidos por Martín Andrizzi, a los 45 minutos de la etapa inicial, y Gustavo Grondona, a los 10' de la segunda parte. En tanto, Carlos Cordone, a los 23 minutos del período final, descontó para San Lorenzo, favorecido por un error garrafal del arquero visitante Oscar Limia.
Con este triunfo, Arsenal alcanzó las 25 unidades, una menos que las que tiene el conjunto de Rubén Darío Insua, que tiene la mente puesta en la final de la Copa Sudamericana frente a Atlético Nacional de Medellín la próxima semana.
En los primeros instantes del partido Arsenal se paró para jugar de contraataque, pero con el transcurrir de los minutos y viendo las facilidades que otorgaba su rival, se adueñó de la pelota y dominó por momentos con relativa comodidad los hilos del partido. Tal fue así que en ese lapso tuvo algunas maniobras para abrir el marcador pero no estuvo certero a la hora de convertir.
La visita tuvo que esperar hasta casi el final de la etapa inicial para concretar en el arco de José Ramírez su superioridad a través de Andrizzi, quien jugó un muy buen partido.
El complemento
En el segundo tiempo no hubo cambios sustanciales, por lo que los dirigidos por Jorge Burruchaga siguieron siendo el principal protagonista y justificaron con creces la ventaja lograda hasta ese momento, que aumentó a los diez minutos por intermedio de Grondona. Ante ese panorama era evidente que los dirigidos por Insua no hacían pie y les costaba encontrarle la vuelta a la historia.
Sin embargo, a los 23 minutos, un error del arquero Limia le permitió al Lobo Carlos Cordone conseguir el descuento y en los siguiente cinco minutos pareció que San Lorenzo podía llegar a la igualdad.
El tanto fue acompañado por el envión anímico de sentirse que podían quedar a tiro del resultado, pero eso fue un espejismo por la chapa no se modificó.
Al fin de cuentas bastó que Andrizzi, el Pulpo González y Piersimone recuperaran protagonismo para que Arsenal volviera a tomar el control del juego y estuviera más cerca de lograr el tercer gol que su rival de llegar al empate. Hubiera sido totalmente injusto que pasara eso porque los locales nunca fueron superiores.
El epílogo llegó con una victoria justa y merecida para un equipo austero que se atreve a pelearle de igual a igual a los grandes. San Lorenzo puede dar fe de ello.(Télam)