Las cuentas del sector público arrojaron durante octubre un superávit de 1.057,9 millones de pesos, en el marco del incumplimiento en el pago de la deuda pública, los ingresos provocados por las retenciones sobre las exportaciones y el giro de utilidades por parte del Banco Central a la Tesorería. Según informó ayer la Secretaría de Hacienda, en octubre de 2001 el Estado había utilizado 874,2 millones de pesos para afrontar sus obligaciones con acreedores, cifra que se redujo a 116,1 millones este año. Los recursos que aportó el Banco Central no fueron discriminados y sólo se informó que los ingresos no tributarios (en los que se incluye esta pauta) crecieron de 30,9 millones de pesos a 832,5 millones. Los ingresos totales sumaron 2.867,4 millones de pesos, mientras que los gastos se ubicaron en 1.743,2 millones, con un saldo positivo de 1.124,2 millones de pesos. Si a esto se le resta el déficit de 66,3 millones producido por las cajas provinciales en manos del Estado nacional, se obtiene el saldo favorable de 1.057,9 millones de pesos. El resultado primario (con cajas provinciales) fue positivo en 1.174 millones de pesos. Según había adelantado ayer el secretario de Hacienda, Jorge Sarghini, este resultado supera las metas que se habían trazado con el FMI. Los ingresos corrientes se componen de 1.984,9 millones de pesos de ingresos tributarios, 50 millones de transferencias corrientes y contribuciones figurativas y 832,5 millones correspondientes a ingresos no tributarios y otras fuentes. Sobre el último punto se incluyen las utilidades líquidas realizadas por el BCRA, que se destinan al "Programa de Financiamiento Ordenado de las Finanzas Provinciales". El gobierno tuvo que apelar a esta fuente de financiamiento para cumplir con los compromisos asumidos en los programas de reducción de déficit fiscal firmados con las provincias ante la demora en el acuerdo con el FMI. En los gastos corrientes se produjo una reducción de 252,8 millones de pesos, que sólo se pudo obtener porque los pagos en los intereses de la deuda bajaron en 758,1 millones de pesos. Por remuneraciones se pagaron 378,5 millones de pesos, por bienes y servicios, 93,4 millones de pesos, por gastos figurativos se giraron 418 millones de pesos y las transferencias corrientes ascendieron a 704,8 millones de pesos. A pesar de los inconvenientes en la negociación con el FMI para contener el gasto, se registró un fuerte incremento en el capítulo de transferencias donde se computan 333,2 millones al sector privado (fundamentalmente para financiar el Plan Jefas y Jefes de Hogar), a provincias se remitieron 239,8 millones y a universidades 123,7.
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