"Fue una avivada"

Al menos dos de los ocho detenidos acusados de ser los captores de Antonio Echarri intentaron despegarse del secuestro al declarar ante el juez que investiga el hecho que no saben nada de la banda y que sólo se quedaron con el dinero que pidieron bajo engaño a Pablo Echarri.
Juan Carlos Casigal, de 33 años, manifestó ayer ante el juez Federal de La Plata Manuel Humberto Blanco que otro de los detenidos, Germán Ferrand Luna, le propuso ir a buscar el dinero del rescate que iba a ser depositado a dos cuadras de la casa de su madre.
Casigal aceptó recuperar la bolsa de consorcio que contenía el dinero, la que halló junto a un árbol en la calle Pichincha.
Añadió que luego de recoger el dinero compró una cerveza e incluso se detuvo unos minutos en una esquina a charlar con un amigo con el que se encontró de casualidad.
Precisó que al llegar a la casa de su madre, Josefina Agüero, de 52 años, en el lugar se encontraban Ferrand Luna, Eduardo el uruguayo Wilson, de 30 años, la pareja de éste Vanessa Castro y Dionisio Furtado.
Casigal coincidió con la declaración de su madre al indicar que cuando la mujer vio esa cantidad de dinero que sacaban de la bolsa le dijo "sacá esta plata de acá", pero no obstante escondió en la casa 30 mil pesos y se llevó consigo seis mil.
Tanto la mujer como su hijo y el resto de las personas que estaban en la casa se fueron a festejar luego al bingo de Caballito, donde eran permanentemente seguidos por los policías.