Año CXXXV
 Nº 49.638
Rosario,
lunes  21 de
octubre de 2002
Min 12º
Máx 18º
 
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cartas
Siguen engañando a la gente

Hoy muchos se alegran por la reforma política que está a punto de ser aprobada en la Cámara de Diputados de la provincia, pero dentro de un tiempo muchos serán los que volverán a culpar a los políticos de que fueron engañados. Antes que nada quiero aclarar que soy un comerciante que mira con asombro cómo engañan a la gente, diciendo que los males del país están en el gasto político. En los últimos tiempos, veo que muchos periodistas bien intencionados y otros no tanto trabajan para el partido que hoy está en el gobierno y hablan de bajar el gasto político. Pero desde el gobierno provincial se apunta a bajar la cantidad de representantes, lo que significa bajar o eliminar la representación de las minorías, quedándose con todo el poder. Por qué digo esto: porque al bajar la cantidad de representantes hacen falta más votos por concejal y sólo los partidos mayoritarios podrán obtenerlos. En la ciudad de Rosario el Concejo Deliberante tiene un presupuesto de $ 12.000.000 anuales para 42 concejales, con una dieta de $ 3.200, que trabajan en 11 comisiones ordinarias. Además cuentan con un sueldo aproximado de $1000, más gastos de movilidad por $ 1.500 mensuales por concejal. Todo esto suma alrededor de $ 5.500.000 anuales. Si con el mismo número de representantes se bajaran las dietas en un 30%, se eliminaran los gastos por movilidad y, en lugar de nombrarse seis asesores por concejal, se nombraran 11 asesores por bloque, este esquema costaría $ 2.025.000. En cambio si la reforma pasa sólo por bajar el número de concejales al 50%, manteniendo el sistema actual, el costo anual del Concejo sería aproximadamente de $ 2.800.000, por lo cual el ahorro sería de $ 2.700.000.
Miguel Angel Siciliano


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