Luis Castro / La Capital
Newell's quiere cambiar el aire. Después de haber soportado una semana llena de sobresaltos por la renuncia de Julio Alberto Zamora, llegó Héctor Veira para cambiar el ánimo del plantel y suministrarle la inyección de motivación que estaba necesitando para afrontar el compromiso de esta tarde ante Gimnasia y tratar de encontrar el rumbo perdido.
Los malos rendimientos y resultados conseguidos en la última etapa del ciclo del Negro llevaron a que el equipo comenzara a desvanecerse porque las ilusiones parecían trocarse con la realidad. Las metas trazadas en el arranque lejos están de concretarse, aunque el Bambino le imprimió el condimento necesario para que los rojinegros comiencen a recuperar la confianza perdida. "Hay que trabajar en el aspecto anímico", fue la primera reflexión del flamante entrenador después del primer encuentro que tuvo con sus dirigidos. Inmediatamente puso manos a la obra y desempolvó todos los argumentos conseguidos y utilizados a lo largo de su extensa trayectoria.
De esa manera consiguió vulnerar la desazón que había invadido al plantel. Y eso le permitió comenzar a desarrollar sin dificultades los ensayos futbolísticos a aplicar sobre el terreno del lobo platense. Presión, juego dinámico y a dos toques, las bases de lo que pretende implementar el Bambino para conseguir la mejoría futbolística.
Veira no optó por realizar demasiadas variantes, sino que apostó a la confianza. Le devolvió la titularidad a Luciano Vella (ocupará el sector derecho de la defensa) y a Gastón Liendo, fuera del equipo por una lumbalgia que, según él, le impidió trabajar con normalidad. Sólo metió mano a las posiciones de algunos nombres en el equipo. A saber: Ponzio jugará como volante por derecha, con mayor responsabilidad de generar juego y llegar al arco de enfrente; Domínguez (ingresó por el lesionado Rosales, lo que obligó al entrenador a mover algunas piezas) se ubicará en el centro; Liendo se moverá por izquierda con las mismas obligaciones que tendrá Leo, y arriba Domizi volverá a acompañar a Sacripanti.
El Bambino apuesta a tener un equipo ofensivo, lo mismo que hará Ramacciotti, quien en los últimos días debe convivir con las críticas y por eso se la juega a conquistar de todas las formas posibles los tres puntos. Esos que también seducen a Veira, ya que quiere tener un debut triunfal y, sobre todo, motivador.
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La Ciudad
