"Educación es poder, y nosotros -los educadores- somos poderosos, por eso muchas veces no nos dejan educar, nos ponen limitaciones para que no eduquemos. Necesitamos recordar todos los días este poder que tenemos". Así concluyó su conferencia, "El poder de los educadores y de la comunidad educativa", Mariano Narodowski, doctor en educación y vicerrector de la Universidad Nacional de Quilmes (UNQ).
Para hacer valer sus palabras Narodowski apeló a muchos ejemplos de escuelas que eligen transformarse más allá de las decisiones que el Estado debería tomar y no asume. "Hay muchas escuelas públicas y privadas del país donde -en las decisiones- mandan los educadores y las familias, donde se construyen proyectos autónomos", dijo.
El investigador, en la misma línea de pensamiento, se opuso a las palabras de funcionarios que dicen que en este país " a nadie le interesa la educación". Para el caso recordó que "si las escuelas están en pie es gracias al esfuerzo de los educadores". También desestimó la idea de muchos maestros, que apoyados en una visión más pesimista de la tarea pedagógica, suelen decir "nada se puede hacer".
En su opinión, a veces es difícil remontar ciertas situaciones escolares, pero "siempre algo se puede buscar, ya sea aliándose con otros educadores, o con los padres, o abriendo las puertas de la escuela, por ejemplo". Para Narodowski, el Estado ya no es quien puede decirle a las familias y a los educadores qué es lo que tienen que hacer. "La toma de decisiones no pueden estar en el Ministerio de Educación, sino en nosotros, padres, educadores y también en los chicos".
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La Ciudad
