Avistaje de ballenas en Puerto Pirámides, buceo en las aguas del golfo Nuevo, visita a chacras que elaboran productos orgánicos en las afueras de Trelew y una caminata por la pingüinera de Punta Tombo, integran la propuesta recreativa de la costa atlántica chubutense, un sitio cargado de magia y tranquilidad al que arriban distintas especies de fauna marina para procrear, en un espectáculo incomparable.
Con motivo de dar a conocer las atracciones de la patagonia central hizo escala en nuestra ciudad una caravana promocional que brindó información sobre las principales sitios de la costa chubutense -Puerto Pirámides, Puerto Madryn, Trelew, Rawson, Playa Unión, Gayman y Dique Ameghino-, las tarifas de alojamiento y las excursiones más solicitadas. La delegación estuvo integrada por Alejandro Albaini, intendente de Puerto Pirámides; Sebastián Planas, de la secretaría de Turismo de Chubut, y Mónica Montes Roberts, gerenta del Ente Turístico de Trelew.
Entre las principales atracciones que ofrece la costa chubutense se destaca el avistaje de la ballena franca austral frente a las costas de Puerto Pirámides, única población estable de península de Valdés. La excursión para apreciar a los cetáceos dura aproximadamente una hora y media y tiene una tarifa de 40 pesos. Otra opción es emprender una cabalgata por la barrancas costeras, que cuesta 15 pesos.
También seducen a los turistas los simpáticos pingüinos que comienzan a arribar a la costa patagónica central durante el mes en curso, en Punta Tombo.
Puerto Pirámides es una comunidad que a principios de 1900 contaba con 2.000 habitantes dedicados principalmente a la provisión de sal a los barcos que transportaban alimentos al Viejo Mundo. Pero con el auge de las cámaras frigoríficas la sal dejó de tener la exclusividad para conservar en buen estado los comestibles durante los viajes. Y el poblado no tardó en acusar el el impacto: en la década del 70 llegó a tener sólo 60 habitantes.
Pero en los últimos años la situación de la localidad chubutense cambió notablemente. De la mano de las ballenas comenzó el auge turístico y hoy viven en Pirámides 350 personas, entre los que se diferencian los originarios pobladores que se dedicaban a la ganadería y la actividad salinera y los "extranjeros", que arribaron para trabajar en turismo.
La ciudad de Trelew es otra de las cabeceras de la costa chubutense. La novedad turística que ofrece es la visita a seis chacras cercanas para apreciar la elaboración de productos gastronómicos típicos de la región, como el paté de conejo y cordero, chocolates y tortas. Los trabajadores de los establecimientos se encargan de explicar los detalles de la cosecha de las frutas finas, que permiten la confección de licores y dulces.
En materia de esparcimiento Trelew cuenta con casino, bingo y boliches para todas las edades. Sus 100 mil habitantes tiene raíces galesas, italianas y españolas, que en los últimos años se mezclan con corrientes migratorias procedentes de Chile, Perú y Bolivia, conformando un verdadero crisol de razas que recibe a los visitantes con los brazos abiertos.
En cuanto a los servicios, las habitaciones dobles en los hoteles de dos estrellas se consiguen desde 30 pesos, un plato de pastas ronda los 8 pesos y un pate de conejo con bebida incluida se puede disfrutar por 20 pesos.
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La Ciudad
