"Cuando terminó el partido, el Mellizo me dijo «mirá que va perdiendo River y quedamos primeros solos» y me puse a pensar si nos convendrá o no ir primeros. Nosotros queremos ser campeones, pero la primera meta que tengo es zafar del descenso y de la promoción. Otro objetivo era ganar en esta cancha. Si llegamos al final peleando le vamos a dar para adelante. Por ahora quiero que los equipos grandes ganen si juegan con Banfield, Arsenal, etcétera".
-¿Si juega Newell's con Olimpo?
-Hincho para Newell's, qué le vamos a hacer. No te digo que lo voy a festejar, pero primero me quiero salvar yo.
-Hasta acá el equipo de Zamora los ayudó bastante.
-Sí, la verdad que sí. Le ganó a Arsenal, a Talleres y a Huracán.
-¿No te da vergüenza querer que gane Newell's?
-No, para nada. Primero está mi pellejo. Además ya les ganamos. Ojalá nos sigan ayudando, pero que no salgan campeones.
-¿Cómo es eso de ser tan hincha del equipo para el que uno juega?
-Es difícil, el domingo en la cancha me puse loco cuando no podíamos hacer el segundo gol. Es mucha responsabilidad, sobre todo para el arquero. Cuando la metió Lagorio le pegué tal puñetazo al palo que todavía me duele. Pirulo (Rivarola) me zamarreaba y me decía «pará Rifle, pará, que lo anuló». Ahí me dí cuenta de que lo ganábamos.
-¿Por qué te tiraste al piso cuando terminó?
-Porque no lo podía creer. Lo soñaba desde las inferiores. Cuando era chico pensaba cómo no me toca jugar a mí un clásico y cortar esa maldita racha.
-¿El sueño terminó?
-No, dejame seguir soñando un ratito más. Ojalá se pueda llegar al final así.
-¿Cargaste a los jugadores de Newell's?
-No, para nada. Ni a ellos ni a la hinchada. En todos estos años aprendí a ser respetuoso de la gente que va a la cancha, que paga su entrada. Porque el fútbol sigue vive por ellos.
-¿Cómo pensás que sería un clásico sin público?
-Horrible, un entrenamiento. Eso no es un clásico. Aunque sea que haya uno de cada lado. Como dice Menotti, si hay dos personas en la cancha, tenemos que jugar por ellos.
| |
La Ciudad
