En la mayoría de los pueblos del departamento Caseros el resurgimiento de la actividad agrícola también está moviendo el mercado inmobiliario y la compra de vehículos. Sin embargo, la reactivación podría haber sido aún mayor para las economías locales si no fuera porque gran parte de los chacareros almacenan el cereal en sus campos y lo venden recién cuando lo necesitan, una nueva costumbre adoptada por la desconfianza que generó el sistema bancario a partir del corralito. Si no fuera por esto, se estima que la circulación de dinero proveniente de la cosecha sería significativamente superior a lo que se mueve actualmente en toda la región.
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La Ciudad
