La final femenina, que se disputará hoy, será un nuevo capítulo del duelo de la familia Williams. Las dos vencieron con total superioridad en sus partidos de semifinales. Será el segundo choque consecutivo de las hermanas estadounidenses en la final de un torneo de Grand Slam, apenas un mes después de que ambas se disputaran también entre ellas el último Roland Garros, un partido cargado de errores que finalmente ganó Serena, quien más allá del resultado de hoy, el lunes será la número uno del mundo. La mayor de las hermanas intentará ahora conquistar el título por tercera vez consecutiva, mientras Serena aspira a su primer título en Wimbledon. "Estoy nerviosa", señaló la menor de las Williams: "Llegué a la final de los últimos tres torneos del Grand Slam que jugué, así que no está nada mal". Para más adelante quedará la discusión sobre cuál es el futuro del tenis femenino con tamaña superioridad de las hermanas estadounidenses respecto de las demás tenistas. Por lo pronto, parecen acercarse tiempos de polarización poco rentable, pero parece imposible modificarlo. La increíble diferencia de potencia física entre las Williams y el resto, hace que el resto de las mujeres quede supeditada a un mal día de Venus o Serena para tener chances de ganar. (DPA)
| |