Carlos Colombo / La Capital
De cara a las elecciones presidenciales, el PJ tomó la punta en la cantidad de nombres ya anotados para la contienda electoral: Adolfo Rodríguez Saá, Carlos Menem, Néstor Kirchner y Juan Carlos Romero. En la otra vereda está la diputada del ARI Elisa Carrió, quien encabeza la mayoría de las encuestas, pero no puede superar la suma de los candidatos peronistas. A estos nombres deben sumarse la centroderechista Patricia Bullrich y el socialista Luis Zamora. Si bien todas las encuestas señalan que la suma de los candidatos del PJ (donde figura Carlos Reutemann, quien aún no decidió si se presentará -ver página 3-) nadie puede asegurar que todos esos dirigentes finalmente traccionen votos para su partido. Rodríguez Saá amenazó con presentarse por fuera de la estructura partidaria si no hay garantías en la interna. En igual medida, el díscolo Kirchner (otrora ligado al duhaldismo) pone el acento en un perfil más progresista y sus fuertes críticas hacia el resto del peronismo lo ponen como otro posible rupturista. Es más, viene manteniendo un romance dialéctico con Lilita Carrió, por lo que no habría que descartar un frente con el ARI o un acuerdo para la segunda vuelta. Poco se puede agregar de Menem, quien anunció su intención de volver a ser candidato el mismo día que transfirió el mando a la Alianza. El caos que vive el país parece ser su mejor aliado para mostrar lo que él pone como su gran virtud: la estabilidad económica. Si bien Menem obtiene el mayor rechazo en la población, sorprendieron varias encuestas en las que la gente cree que será el próximo presidente, aunque su intención de voto aún no llega a los dos dígitos. Rodríguez Saá viene recorriendo el país y ha marcado un fuerte crecimiento en los sondeos, sobre todo en los sectores más bajos y en el interior del país. El puntano muestra el éxito administrativo de San Luis como el mayor logro para volver al Sillón de Rivadavia. El salteño Romero anunció su intención de pelear las internas, pero todos lo ven más como vice de otro candidato que encabezando una fórmula. A fuerza de denuncias y una alta exposición mediática Carrió viene construyendo su candidatura con los restos de la vieja Alianza y sumando independientes. La pregunta que todos se hacen es si podrá consolidarse o será un nuevo Frepaso. La izquierda vive, tal vez, su mejor momento. Zamora tiene muy buena imagen y una fuerte intención de voto en los centros urbanos. A esto habría que sumarle los movimientos piqueteros que responden mayoritariamente a la Corriente Clasista y Combativa, del Partido Comunista Revolucionario; el Polo Obrero (del Partido Obrero) y otros movimientos como Barrios de Pie y sectores del Polo Social del padre Luis Farinello. La duda es la de siempre: ¿podrá esta vez la izquierda confluir detrás de un solo candidato o irá dividida? Por el lado de la centroderecha, la única que lanzó su candidatura es la ex todo Patricia Bullrich. También aspiran a consolidarse en ese espectro Ricardo López Murphy, Gustavo Beliz y Mauricio Macri. Por otro lado, los partidos provinciales vienen trabajando para colocar un candidato. Hay dos nombres: el demoprogresista Alberto Natale y el gobernador neuquino Jorge Sobisch. El radicalismo merece una nota aparte: sumido en una profunda crisis, el único que anunció la intención de postularse es Rodolfo Terragno.
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