El Congreso de EEUU inició ayer una serie de audiencias a puertas cerradas para aclarar las fallas de los servicios de inteligencia antes de los atentados y proponer reformas que eviten nuevos errores. Las audiencias secretas, dirigidas por un panel conjunto de inteligencia del Senado y la Cámara de Representantes comenzaron en una protegida sala sin ventanas y con aislamiento de sonido del edificio del Capitolio y podrían prolongarse durante meses. El comité judicial del Senado realizará mañana la primera de una serie de audiencias abiertas al público. "Creo que el primer objetivo es el conocimiento público de lo que sucedió y asegurarse de que tomaremos las medidas necesarias para mejorar la seguridad nacional para que esto no vuelva a ocurrir", dijo Porter Goss, presidente del selecto comité de inteligencia de Representantes y ex agente de la CIA. (AFP)
| |