El delantero de la selección argentina Claudio Caniggia volvió a hacer un trabajo diferenciado en el entrenamiento de ayer, mientras el resto de sus compañeros se repartían por la cancha según las instrucciones del entrenador Marcelo Bielsa. Si bien se nota un mejoramiento en el rendimiento físico, el delantero todavía no está en el "ritmo de los punteros". Cada movimiento del delantero es una prueba para la rodilla izquierda, que sufrió un esguince hace un mes. Caniggia hizo piques de 20 metros, toques de pelota y devolución, siempre descargando el peso de la pegada en la pierna izquierda para comprobar cómo respondía su rodilla. Luis Bonini, el preparador físico, lo siguió en cada movimiento. Pero el Pájaro no estuvo solo. Lo acompañaron en el trabajo Gabriel Batistuta y Ariel Ortega, como receptores de sus descargas y hasta de algunos pelotazos con los que se animó el punta de Rangers de Escocia. Bielsa, cada tanto, recibía información de sus colaboradores. ¿Estará Cani desde el arranque frente a Inglaterra, pasado mañana? Difícil, muy difícil. En el debut ante Nigeria apareció entre los suplentes pero sin la pilcha de juego. Si se la pone para el partido ante los ingleses y se sienta en el banco, al costado de Bielsa, ya será un avance. Da toda la sensación que recién ante el seleccionado de Suecia estará en condiciones de entrar algunos minutos y volar por la derecha del ataque, como quiere el entrenador. (Olé/DyN/Ovacion)
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