El volante argentino Matías Almeyda manifestó que al grupo de jugadores que integran el seleccionado argentino se le "está haciendo difícil controlar la ansiedad que se produce entre un partido y otro, sobre todo porque el rival que viene es Inglaterra".
"Si bien en el plantel reina una aparente tranquilidad, todos estamos esperando que llegue el momento de jugar porque se hacen bastante largos estos días entre partido y partido", puntualizó Almeyda a la prensa durante una apurada conferencia de prensa, que se realizó entre el segundo y tercer turno de trabajo desarrollado en la tarde japonesa por el equipo nacional.
El mediocampista de Parma de Italia, y suplente en la selección de Marcelo Bielsa, fue uno de los dos jugadores que tuvo contacto con la prensa en el J-Village de Naraha, el otro fue Claudio Husain.
Posteriormente, y en igual tono que la mayoría de los integrantes de la selección (con excepción del arquero Pablo Cavallero, quien aseguró ayer que "a Inglaterra hay que ganarle por lo que pasó en las islas Malvinas"), el oriundo de la ciudad bonaerense de Azul expresó que el cotejo ante los británicos "no es una guerra, sino parte del deporte".
Sin embargo Almeyda admitió que el del próximo viernes será "un partido especial", en alusión a la acentuada rivalidad que se construyó en los últimos mundiales. "Inglaterra es un rival difícil y los 90 minutos de juego seguramente serán muy duros", aunque estimó con confianza que "Argentina está bien para enfrentarlo".
Almeyda, de 29 años, consideró que si bien "después de 1982 (con la guerra de Malvinas) los encuentros Argentina-Inglaterra son un clásico y seguirán siéndolo, lo importante es sacar un buen resultado para seguir adelante".
Luego reconoció que se alegró con el empate entre Inglaterra y Suecia (1 a 1), que dejó a Argentina como único líder del grupo F del Mundial Corea-Japón.
El ex River Plate coincidió también con sus compañeros sobre la importancia de haber ganado el primer partido ante Nigeria, porque "siempre es importante empezar ganando y no crear dudas".
"La victoria te da seguridad y este equipo puede seguir creciendo. Este es un equipo sólido y Nigeria no creó situaciones de gol, pero nosotros sí. Al equipo argentino lo vi bien, muy seguro", señaló Almeyda a manera de análisis del debut.
Los jugadores realizaron ayer una práctica en la que el defensor y capitán Roberto Ayala, descartado para el viernes, hizo un tratamiento fisioterapéutico.
En tanto el delantero Claudio Caniggia empezó a trabajar con pelota e intercambió remates con Gabriel Batistuta y Diego Simeone, y si bien no llegará al cotejo con Inglaterra, su evolución le permitiría a Bielsa contar con él para el tercer encuentro con Suecia del 12 de junio.
Claro que si para entonces Argentina tiene el primer lugar del grupo F asegurado, quizás más de un actual suplente sea titular ese día. (Télam)
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