El ecoturismo, tal como lo define la UICN (Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza), es "aquella modalidad turística ambientalmente responsable consistente en viajar o visitar áreas naturales sin causar disturbios, con el fin de disfrutar y estudiar los atractivos naturales y culturales del presente o del pasado. Es un proceso que promueve la conservación y el involucramiento activo".
El concepto, relativamente nuevo, aparece en los últimos años para definir una actividad que en El Bolsón se desarrolla desde hace tiempo. Aquí, lo novedoso, en todo caso, es la profesionalización de esta modalidad, el descubrimiento de su sinergia ambiental y económica.
En las antípodas del turismo estudiantil convencional, el ecoturismo viene convirtiéndose en una alternativa como viajes de egresados para aquellos jóvenes que buscan algo realmente diferente. Una experiencia de convivencia e interrelación con la naturaleza. Una sensación que nos deja ver como era la vida antes de las ciudades.
Luego de consultas y reuniones sectoriales realizadas en el último año, finalmente la comarca andina estrena su isotipo genérico y marca de origen en sus productos y servicios regionales. En respuesta a una solicitud formulada en agosto del año pasado, el experto español Alex Blanch, luego de trabajar sobre propuestas de empresarios, prestadores y funcionarios del sector público, sintetizó en la imagen, denominada "El Rey de la Patagonia", los atributos de la naturaleza y lo remoto, lo étnico y lo ancestral.
El isotipo (la imagen) acompañará a partir de ahora las presentaciones publicitarias de los productos y los servicios que se generen en las localidades de la comarca, las rionegrinas de El Bolsón y El Manso y en El Hoyo, Epuyén, Lago Puelo, El Maitén y Cholila del Chubut.
El aroma de la cerveza
Casi un ícono de la localidad, la producción de lúpulo -insumo aromático de la cerveza del que El Bolsón provee los dos tercios del utilizado en el país- constituyó su principal cultivo. Hoy, diversificado, y a tono con las declaraciones de tenor político que procuran asociar el desarrollo de la localidad al carácter ecológico de su producción, un importante número de chacras -algunas muy cercanas al centro de la ciudad- ofrecen la posibilidad de visitar sus instalaciones, degustar y comprar quesos, truchas, dulces, frutas finas y verduras, producidos y elaborados siguiendo rigurosos métodos orgánicos monitoreados por agencias internacionales. En algunos de estos establecimientos, el visitante puede alojarse en cabañas y cocinar los alimentos que él mismo coseche de la huerta.
Las cervezas artesanales son otro orgullo local: la imaginación desinhibida de los productores se manifiesta en variedad: a la típica cerveza Pilsen, (originaria de Checoslovaquia), de mediano contenido alcohólico, se le agrega la negra, resultado del tostado de la malta; la negra ahumada, muy popular en Bamberg (Alemania), que se obtiene tostando la malta con leña del bosque en forma directa; las frutadas, de mostos fermentados con frutas frescas de El Bolsón, frambuesas, cerezas y cassis. Esta última, una cerveza típica del sur de Alemania, preparada con trigo orgánico del valle de Epuyén.
Además de éstas, Juan Carlos Bahlaj, uno de los artesanos cerveceros, prepara variedades de estación: en primavera, de trigo con hierba buena. En verano, para saciar la sed, más livianas y aromáticas. En otoño, con miel y lúpulo en flor. En invierno, tipo triple bock, bien fuerte y reconstituyente.
Los lácteos constituyen otro de los renglones que los emprendedores locales vienen desarrollando en los últimos años. Dulces de leche, quesos ahumados (con sistema de ahumado alemán de humo frío), quesos saborizados (ají, orégano, kümel, pimienta) de leche de vaca y de oveja, son algunas de las elaboraciones que desde las chacras de El Bolsón se lanzan a la conquista de los mercados nacionales e internacionales.
Chacra Humus completa su oferta de productos ecológicos con leche entera orgánica pasteurizada en sachet (uno de los pocos emprendimientos en el país de este producto).
La "cocina patagónica de autor" admite también el aporte de las pisciculturas locales. Truchas frescas, ahumadas, patés, lomitos a la manteca, encurtidos y otros derivados, son producidos y elaborados en los tres establecimientos que, además, constituyen un paseo más para el visitante inquieto. Las enormes piletas pueden recorrerse para admirar truchas arco iris de todos los tamaños, desde los diminutos alevinos, hasta los gigantescos reproductores.