Los especialistas del CIE dijeron que "en esta época, la gente está sacrificando su salud por dinero. Sabe que está viviendo en una zona donde hay diversos tipos de contaminación, pero no puede elegir. La condición laboral de un pescador en el río, de un peón en el campo, de un obrero en una fábrica, quizás no es buena, pero lo tolera". "Cuando la gente se inquieta ante la instalación de una empresa que puede contaminar debe saber que para que eso sea posible hay normas que regula la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Sustentables de la provincia, con una legislación bastante actualizada", detallaron los ingenieros. "Las empresas deben considerar que la inversión en seguridad es negocio, pero hay que ver si tienen recursos. Con la ley de riesgo de trabajo, las ART tienen que visitar las fábricas para controlarlas, pero en la práctica no se hace correctamente, es un control burocrático. Se debe brindar un servicio de asistencia técnica, junto a los beneficios médicos y de cobertura. La mejor forma de prevenir es cumplir con las disposiciones, el soporte legal está, hay que cumplirlo. Todas las empresas deberían contar con un profesional de higiene y seguridad que las asesoren", aconsejaron.
| |