Aníbal Fucaraccio / La Capital
Por muy poco Atlético del Rosario no pudo retornar al triunfo en Tortuguitas. Le señalaron un penal y un try en los últimos cinco minutos y eso determinó la caída frente a Alumni por 32 a 24 en uno de los encuentros más destacados de la séptima fecha del torneo superior, que organiza la Unión de Rugby de Buenos Aires (Urba). De esta manera, cosechó su segunda derrota consecutiva en el certamen, ya que la semana pasada fue derrotado por el SIC en el pasaje Gould. El choque entre los dos últimos campeones del rugby porteño se presentaba como una gran atracción, y ambos equipos no defraudaron porque disputaron un encuentro intenso, parejo y disputado hasta el pitazo final de Marcelo Pilara. Atlético no mereció perder. Hizo los méritos necesarios como para ganar, o al menos empatar, pero el oficio y la mayor experiencia de los hombres de Tortuguitas inclinaron la balanza en la expiración del cotejo. La mala fortuna y la falta de concentración para mantener el resultado en los instantes decisivos incluso despojó al equipo rosarino del bonus y lo dejó con las manos vacías como dolorosa retribución al enorme esfuerzo exhibido durante los 80 minutos. En el primer tiempo Plaza fue más. En un contexto donde no se sacaban demasiadas diferencias, los dirigidos por Gonzalo del Cerro y Gabriel Estellés pudieron hacer prevalecer su juego integral y se retiraron al descanso con un 14 a 8 a su favor. El complemento fue más entretenido. En esos segundos 45 minutos el encuentro fue cambiando de dueño merced al buen trabajo del pack local y a la mejora en los envíos a los postes de Santiago Van der Ghote. Los rojiblancos generaban infracciones en campo enemigo y las aprovechaban con la puntería de su fullback, quien fue una de las figuras del partido junto a Mario Gerosa. Faltando dos minutos para el tiempo cumplido Atlético ganaba 24 a 22 y veía cercana la victoria. Pero el destino se encaprichó en contra de las sus intenciones y el aplomo del último campeón de la Urba hizo el resto. Van der Ghote clavó tres puntos con un penal y en el descuento el octavo Juan Pablo Bianchi sentenció la historia con un try que dejó al marcador definitivo sin el aval de la justicia. Atlético volvió a perder, pero esta vez mostró otra imagen con respecto a su encuentro anterior. Ayer le jugó de igual a igual nada menos que a Alumni en Tortuguitas y eso marca que las ansias de crecimiento siguen vigentes e intactas en el equipo rosarino.
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