El gobierno nacional confirmó ayer que la suerte de los salarios de la administración pública quedará atada a la evolución de la recaudación fiscal y confirmó que la "prioridad" la tienen los jubilados y los planes sociales. Sin embargo, el presidente Eduardo Duhalde fue contundente al señalar la posibilidad de que el Estado no esté en condiciones de poder pagar los sueldos de febrero "porque no hay dinero".
Duhalde dijo que "ayer (por el jueves) he decidido que los programas sociales y alimentarios sean puestos en (primer) orden de lo que debe pagar el Estado, porque este mes creo que no vamos a poder terminar de pagar sueldos".
"No pareciera que podemos pagar íntegramente sueldos. No hay dinero, entonces no se puede pagar", sentenció el jefe del Estado, quien ayer viajó a Tucumán (ver página 8) y mañana presidirá una reunión de gabinete en Santiago del Estero.
Los dichos del primer mandatario debieron ser ratificados por la tarde por el secretario de Hacienda, Oscar Lamberto, quien señaló que "el gobierno va a hacer todo el esfuerzo" para poder pagar a los estatales, pero admitió que se prevé una caída del 12 por ciento en la recaudación.
Lamberto advirtió que el pago de salarios "va a depender de cómo se comporte la recaudación", y destacó: "No es una buena noticia, por eso tenemos que hacer todo el esfuerzo para materializar el pago en tiempo y forma".
Ante la mala nueva, el titular de la CGT oficial, Rodolfo Daer, pronosticó que "va a haber un gran estallido" si el gobierno no paga los salarios de los estatales.
Y el secretario de ATE nacional, Juan González, consideró que el no pago de los salarios en su totalidad es "una suerte de extorsión", porque el Ejecutivo necesita "negociar la aprobación del presupuesto con los gobernadores" y por eso ejerce esta "presión".
"Si no pagan lo sueldos va a haber un gran estallido, es impensado, se tienen que garantizar los salarios a lo largo y a lo ancho del país", dijo Daer, al salir al cruce de las declaraciones de Duhalde. El sindicalista afirmó que "es imprevisible lo que puede pasar" si no se pagan los salarios a los estatales, e insistió en que "se tienen que pagar y se tienen que reinstalar las retenciones a las exportaciones".
"El presidente anunció esa posibilidad, nosotros la rechazamos. Lo que tiene que hacer el gobierno es reinstalar los reembolsos de las exportaciones, con eso monetizar y garantizar los salarios" de los trabajadores públicos y los jubilados, reiteró, al tiempo que enfatizó: "No se puede ceder frente a los exportadores".
Daer insistió en que lo expresado por Duhalde "es impensado" y alertó que "si no paga la Nación, no pagan las provincias y no pagan los municipios".
Por su parte, González dijo opinó que se trata de "una provocación irresponsable" pero advirtió que "la intencionalidad de esta declaración, a casi 15 días de la fecha del pago de sueldo, es usarlo como presión para la aprobación del presupuesto".
"De lo contrario, el gobierno no va a tener los recursos comprometidos por el FMI para el financiamiento de las políticas públicas", añadió el sindicalista.
"Si se siguen reduciendo los recursos y la capacidad de consumo esto se convertirá en un círculo vicioso como consecuencia del cual habrá menos capacidad de demanda interna, más recesión, menor ingreso y más ajuste", concluyó González.
Remes: "Hay que esperar"
Para colmo, el ministro de Economía, Jorge Remes Lenicov, salió al cruce del reclamo del sector sindical sobre una actualización del salario mínimo. "No es el momento para plantear eso", subrayó tajante, y añadió que "para esas cosas hay que esperar".
La respuesta del ministro se relaciona con el planteo realizado por dirigentes de la CGT y de la CTA para que se actualice el salario mínimo, ante el incremento que están registrando los precios de productos de primera necesidad, entre otros.
La Ciudad
