Fridman no podrá estar detenido en su domicilio

Así lo resolvió la Cámara de Apelaciones. Es el médico acusado por el brutal crimen de un gerente

La Cámara de Apelaciones en lo Penal rechazó finalmente el pedido de prisión domiciliaria planteado por el médico Eduardo Fridman, de 74 años, quien fue procesado por el crimen alevoso del gerente de la Asociación Española de Socorros Mutuos, Claudio Zampol. Los jueces dispusieron que el profesional deberá cumplir su detención en un establecimiento penal debido a su "peligrosidad" y a la gravedad del hecho del que está acusado.
La solicitud había sido presentada por la defensa del médico en base al artículo 33 de la ley 24660, que prevé la detención domiciliaria de las personas mayores de 70 años o con graves problemas de salud. El pedido había sido rechazado por el juez de la causa, Carlos Carbone, en función de la conflictiva personalidad del imputado. Pero el defensor del médico apeló la decisión del juez y acudió a la Cámara Penal.
Luego el pedido fue denegado por el fiscal de Cámaras José María Peña, quien consideró que Fridman es un hombre "proclive a mantener violentos incidentes por causas sin importancia".
Finalmente, en forma coincidente con el juez Carbone y el fiscal Peña, los jueces de la Cámara de Apelación aludieron a la conflictiva personalidad del imputado para negarle el beneficio de la prisión domiciliaria.
Para ello, los camaristas Ernesto Pangia, Humberto Giménez y Alberto Bernardini tuvieron en cuenta la "gravedad del conmocionante hecho" que protagonizó Fridman, su "singular comportamiento" y la alta pena que podría corresponderle en caso de que lo condenaran, ya que está acusado de un delito que prevé la prisión perpetua.
Para los magistrados, las características propias del hecho "avalan la consideración de un individuo peligroso". Al respecto enumeraron los testimonios de empleados de la mutual donde trabajaba Fridman, los cuales "ilustran un comportamiento violento e irascible"; el hecho de que portara armas dentro de su lugar de trabajo en pleno centro de la ciudad y la "desproporcionada reacción" que tuvo el 19 de noviembre pasado al asesinar de un disparo en la cabeza al gerente Zampol.