Vestigios imperiales

En los siguientes poblados se encuentran monumentos que representan la huella de la mística civilización maya
* Tulúm, a poco más de 100 kilómetros al sur de Cancún, uno de los principales centros ceremoniales de los mayas. Se puede apreciar lo que fue una ciudad amurallada frente al mar. Representa la posibilidad de conjugar el conocimiento de la cultura maya con las aguas azul turquesa de la costa de Quintana Roo en una misma visita.
* Chichén Itzá, a 160 kilómetros de Cancún, es una de las zonas arqueológicas más ricas y más grandes. Fue allí donde se encontraba el centro ceremonial más importante de los mayas. Su nombre significa La boca del pozo de los itzaes. Chichén Itzá ha dado la vuelta al mundo con la imagen de la pirámide de Kukulcán, en donde en cada equinoccio se congregan millares de personas para apreciar el espectáculo de luz y sonido. Su historia mística se complementa con la increíble acústica del lugar: desde un extremo es posible escuchar a alguien que esté hablando con un tono normal al otro extremo del lugar (más de 70 metros).
* Uxmal, ciudad que también cuenta con un espectáculo de luz y sonido. En ella se albergan las estructuras más elegantes del mundo maya. El Palacio de los Adivinos es el único edificio de la cultura maya que está sostenido en una base oval. De acuerdo con la leyenda, fue construido en un día por un enano hechicero que se convirtió en su gobernante. No hay que olvidar de visitar el convento y el Palacio de los Gobernantes, edificio estilizado, coronado por una deslumbrante cenefa construida con 20 mil piedras talladas.
* Cobá es una combinación de los mayores atractivos de Uxmal y Chichén Itzá, pero su ubicación geográfica, a unos 100 kilómetros de Cancún, le añade el atractivo de aventura que le da la jungla en la cual se encuentra inmerso. Sobresale en este lugar la pirámide de Nohoch Mul, considerada la más alta de su tipo en la península de Yucatán.