El director ejecutivo de la Asociación de Bancos de la Argentina (ABA), Norberto Peruzzotti, señaló ayer que la afluencia de público a las entidades financieras comenzó a mermar y estimó que para la próxima semana van a aparecer "los primeros síntomas de alivio".
"La afluencia de público ha empezado a mermar, aunque lentamente, y a medida que baje la presencia de clientes nuevos, que requieren de mayores explicaciones, la situación va a tender a normalizarse", aseguró Peruzzotti.
Las declaraciones del directivo de la entidad que nuclea a los principales bancos del sistema financiero argentino buscan atenuar la disconformidad que reina entre los usuarios por las demoras en las transacciones a raíz de las nuevas medidas, especialmente las relacionadas con las transferencias bancarias entre distintas entidades, que llegaron a promediar los cinco días.
Peruzzotti consideró que "pese a que este es un mes muy malo porque todo el mundo reclama más dinero, la semana que viene vamos a tener los primeros síntomas de alivio, lo que no significa que no vaya a permanecer una alta cantidad de operaciones bancarias".
Detalló además que "hay algunos procesos que están mejor encaminados que otros, en los cajeros automáticos las dos redes han trabajado muy intensamente y dicen que la normalización, es decir la posibilidad de operar transferencias desde cajeros, va a ser a partir de la semana que viene".
"El tema de las transferencias por débito han sobrepasado los sistemas, que han sido saturados. El Banco Central y todas las entidades están trabajando para mejorarlo", dijo Peruzzotti y agregó: "Nosotros estamos haciendo nuestros deberes pero acá se necesita una concertación política porque si no la gente tiene incertidumbre sobre el futuro del país".
Al referirse a los problemas técnicos que exhiben los bancos para cumplir con las nuevas operatorias, motivo de cientos de quejas de los clientes, Peruzzotti admitió que el sistema financiero no estaba preparado para bancarizar la economía tan rápidamente, y destacó que si el proceso no fue más traumático "es por el enorme esfuerzo del personal" de empleados y autoridades de las entidades.
"El sistema estaba preparado para bancarizarse en cuatro o cinco años, no en 48 horas", indicó Peruzzotti, quien señaló que "el gobierno decidió eso, entonces sucede lo que sucede. Y no ha sucedido más por el enorme esfuerzo del personal bancario, que es realmente asombroso"
El crac de todos
Por otra parte, el director Ejecutivo de ABA se empeñó en desmentir las versiones sobre diferencias entre la banca nacional y extranjera y desechó las versiones que indicaban la posibilidad de que se plantearan normas diferenciales para los bancos con capitales de origen internacional.
Negó además que algún banco esté por "caer" ante la crisis financiera, pero señaló que cuando estalló el "crac" y se dispuso la restricción monetaria, "no estuvo por caer ningún banco sino todos los bancos".
La desmentida vino a cuento de las sucesivas versiones sobre la situación del Banco Galicia, que fue objeto de rumores en los últimos días.
El directivo sostuvo que "lo que hizo el Banco Central fue defender al depositante", con las restricciones a la extracción de depósitos, y destacó que "si hubiera continuado ese proceso -la corrida bancaria-, hubieran desaparecido fondos del sistema financiero".
Baja la tensión en la city
En la plaza financiera los operadores reconocieron que se vivió ayer una jornada algo más tranquila, pero admiten que los inversores están atentos a cualquier señal que pueda volver a cambiar las reglas de juego, según los comentarios escuchados en la city.Con el efectivo congelado parcialmente en el sistema, las intermediaciones de fondos entre bancos fueron escasas y el call por un día cerró al 11% anual en dólares.
De acuerdo con los últimos datos del Banco Central, los ahorristas que renovaron sus depósitos accedieron a una tasa promedio del 0,59% mensual, equivalente al 7,23% anual, mientras que las colocaciones en dólares lograron un rendimiento promedio del 8,69%.
Los saldos inmovilizados en las cajas de ahorro se pagaron 0,17% mensual o un 2,07% expresado en términos anuales, de tal forma que los rendimientos volvieron a bajar para todas las alternativas.
También se advirtió cierta descompresión de la demanda de billetes norteamericanos y en esto tuvo mucho que ver el mejor abastecimiento de las casas de cambio.