La provincia de Santa Fe está afrontado dificultades en varias regiones debido al exceso de lluvias, granizadas y fuertes tormentas de viento, con importantes daños en la producción agropecuaria, los bienes materiales y las personas. Según estimaciones oficiales, las pérdidas acumuladas en los distintos distritos ya superan los 400 millones de pesos..
Informes elaborados por el Magic dan cuenta de que, a la inundación de 200.000 hectáreas en el sur, se le han agregado en noviembre daños en otras zonas con pérdidas en cultivos, forrajes, mejoras fijas y hasta hacienda muerta.
La costa, que produce hortalizas y flores, sufrió granizadas y tormentas con pérdidas importantes de producción. Localidades del extremo norte de Santa Fe están recibiendo copiosas lluvias que complican la evolución de los cultivos.
En el centro oeste santafesino una fuerte tormenta con granizo produjo daños en unas 50.000 hectáreas, principalmente tambera, con 200 molinos destruidos, 70 vacunos muertos y muchas casas e instalaciones dañadas.
La zona Rosafé soportó durante esta semana fuertes vientos, en parte con granizo, que produjeron pérdidas en trigo y maíz, destrucción de silos y norias, caídas de líneas de suministro eléctrico y anegamientos de campos.
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La Ciudad
