Al Qaeda tenía instrucciones para preparar ricina, una potente toxina. Las instrucciones estaban contenidas en una serie de documentos encontrados en Kabul. La ricina es uno de los agentes biológicos más tóxicos, y fue utilizado por la policía secreta de Bulgaria para matar en 1978 al disidente búlgaro Georgi Markov, quien murió después de ser apuñalado con la punta de un paraguas en el puente Waterloo de Londres. El veneno se extrae de las semillas del ricino, una planta originaria de Asia. Los textos detallan, además, la agonía que sufre la víctima antes de su muerte en un plazo de tres a 15 días, tras padecer vómitos, dolores estomacales, sed, diarrea y deshidratación. (Télam)
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