Actualmente en toda Europa existen un millón de hectáreas en agricultura de conservación (mínima labranza), que no es siembra directa. España cuenta con superficie agrícola de 10 millones de hectáreas y según Martín Ambroggio, coordinador técnico de Aapresid, "estamos frente a una oportunidad inigualable para posicionarnos como un país líder en materia de siembra directa, donde no sólo hemos logrado incrementar la productividad sino también mejorar el recurso suelo".
"Esto es importante para generar una imagen ante nuestros principales mercados compradores, ya que deben tener en cuenta que cada grano que se envía desde la Argentina fue producido bajo un sistema de producción que esta en armonía con la naturaleza, con suelos que no se degradan. Comercialmente, ser referentes en siembra directa facilitará el posicionamiento de la maquinarias con procedencia Argentina", señaló.
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La Ciudad
