La Asociación Rosarina de Ayuda al Enfermo Fibroquístico ofrece una serie de consejos a los docentes que están en contacto con niños enfermos, para conocer mejor la afección y aprender a convivir con ella: 1) La enfermedad es genética e incurable, pero no contagiosa. 2) La inteligencia del enfermo es normal. 3) El niño toserá con frecuencia y, quizás en algún momento preferirá retirarse para expectorar. 4) Es necesario que se le permita ir al baño cada vez que lo solicite. 5) Es importante que realice ejercicios físicos, pero si se cansa demasiado será conveniente interrumpir hasta que se recupere. 6) Muchas veces deberá faltar a clases, irá luego de una terapia kinesiológica o una internación. Necesitará entonces más apoyo de su maestro para integrarse al grupo y no sentirse disminuido. 7) El maestro es una persona muy importante en la vida de un niño, por eso es necesario que sepa todo de él. En caso de dudas, conversar con los padres.
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